El Partido Socialista (PSOE) y Coalición Canaria (CC) separan finalmente sus caminos tras más de siete años juntos y, sobre todo, después de un mandato en el que la ruptura del pacto ha sobrevolado de forma incesante el Ayuntamiento de La Laguna. La decisión la adoptó en la mañana de ayer la Comisión Ejecutiva Local de la formación de la rosa. "Es inmediato", afirmó sobre la aplicación del acuerdo el secretario general del PSOE lagunero, Luis Yeray Gutiérrez. "Este domingo se elevará a la Regional y, por tanto, desde que la Federal nos dé el OK, lo que hemos decidido aquí se llevará a la práctica", puntualizó, al término del cónclave y en declaraciones a los medios, el también candidato a la Alcaldía.

La cita, que comenzó a las 11:00 horas, finalizó con un comunicado firmado por el secretario de Organización -Óscar Olave-, en el que se recogen tres puntos: "Dejar sin efecto y abandonar el actual pacto de gobierno (...) y, por consiguiente, la salida del equipo de gobierno municipal, con la consecuente renuncia de todas sus áreas y competencias", "Elevar el presente acuerdo al órgano superior competente o, lo que es lo mismo, a la Dirección Ejecutiva Regional del PSC-PSOE, para que proceda a su aprobación, y elevarlo a la Dirección de la Comisión Ejecutiva Federal para su ratificación" e "Informar a la Dirección Insular del PSOE de Tenerife de los acuerdos adoptados".

Pese a que, a juzgar por el texto, la decisión queda supeditada al criterio de las cúpulas canaria y nacional, la realidad es que el paso está dado. Lo corroboró el propio Gutiérrez, que apuntó que hubo "diferentes reuniones y reflexiones" previas con el ámbito regional, "con el acuerdo de la Federal". Eso sí, dijo que en ese intercambio de pareceres no se trató la conformación de otro gobierno. "A día de hoy no hemos hablado de ninguna posibilidad de moción de censura", sostuvo, antes de precisar que eso responde a que el grupo municipal socialista ha de normalizar su situación (tiene tres ediles expulsados) antes de dar un paso de ese tipo.

Ante la atenta mirada de sus más cercanos colaboradores, Gutiérrez informó de que, de los 25 miembros de la Ejecutiva Local, solo hubo dos abstenciones. "Las concejalas no tienen voto en este proceso porque no forman parte de la ejecutiva, sino que son miembros natos", señaló al ser cuestionado por esos dos militantes que no dieron su total respaldo a la ruptura. Según otras fuentes, se trató de los asesores municipales David Perdomo y Omar David Ramos, afines a Martín.

También expuso el secretario general local que la determinación adoptada ayer la venían marcando "desde el minuto uno" en que se presentaron a las primarias, y expresó su voluntad de "cambiar el escenario político y mirar a la izquierda". "Tanto Mónica Martín como María José Castañeda han aceptado lo que se ha comandado desde la Ejecutiva Local y, como tal, han decidido también aceptar lo que dice la mayoría", indicó sobre la postura de las actuales concejalas socialistas, rivales suyas en el reciente proceso para designar al cabeza de cartel en 2019.

En cuanto al abandono ahora y no antes del equipo de gobierno, argumentó que lleva diez meses al frente de la organización. "De aquí para atrás, evidentemente, yo no tenía responsabilidades y poco puedo decir", mantuvo el máximo dirigente de los socialistas laguneros. "Lo que sí digo es que hemos planteado públicamente que teníamos que mirar a la izquierda de inmediato y hoy, apenas ocho días después, lo hemos hecho posible con el apoyo de la ejecutiva y saliendo de un pacto de gobierno que nada nos aportaba". ¿Y, si no están de acuerdo con este, por qué no presentan una moción de censura? "Como decía, no tenía competencias en el ámbito orgánico; a partir de ahora miraremos al futuro", aseguró.