La primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de La Laguna, Mónica Martín, defendió ayer la situación en la que se encuentra el pueblo costero de Bajamar. En una entrevista en "El día por delante", en Radio El Día, que seguía a las críticas vecinales, la también concejala de Servicios Municipales discrepó de que sea una "zona olvidada".

La edil relativizó las quejas, e indicó que es "el sentir de algún vecino". "Las cosas podían estar mejor, pero, en una comparativa con otros lugares costeros de la Isla y del Archipiélago, mi visión es un poco más positiva", apuntó, antes de poner de relieve que se ha trabajado "mucho" en los últimos años y de recordar que Bajamar tiene una Bandera Azul.

Preguntada por los cortes eléctricos, que haya residentes que entienden que son tratados como "ciudadanos de segunda", que no dispongan de fibra óptica y que las obras en la carretera no terminen de salir adelante, Martín respondió sobre lo primero que ella es la responsable del alumbrado público -no así del suministro de las viviendas- y que le consta que el alcalde, José Alberto Díaz, está realizando gestiones, "igual que con el tema de la fibra".

"Se ha retrasado mucho esa obra, que es del Cabildo", expresó en cuanto a la reparación del dique y, a renglón seguido, hizo mención a la fuerza con la que golpea el mar en la costa lagunera.

Sea como fuere, consideró que las instalaciones de baño bajamareras se encuentran "en bastante buen estado" y que el mantenimiento es el mismo en todos los puntos costeros del término municipal. "Otra cosa es que sea mejorable", apostilló, y dijo que cree que el bar de las piscinas no estará operativo este verano, pero precisó se trata de problemas administrativos y, en particular, debidos a los recursos presentados por el anterior adjudicatario.