Un justo reconocimiento. Desde ayer, el presbítero, jurista e historiador José Rodríguez Moure (1855-1936) cuenta con un busto en la plaza Doctor Olivera que pretende recordar a uno de los personajes laguneros que más profunda huella han dejado en la historia moderna de La Laguna.

En un sencillo acto de presentación del busto celebrado frente a La Concepción, el alcalde de La Laguna y el obispo de la Diócesis de Tenerife, José Alberto Díaz y Bernardo Álvarez, respectivamente, pusieron en valor la figura del ilustre lagunero que se ha hecho presente gracias a las manos del escultor Ibrahim Hernández, que dio una nueva vida a Rodríguez Moure. Meses antes, el artista presentó al obispo los trabajos realizados para hacer realidad el busto del afamado historiador.