La gestora del PSOE de El Rosario fijó ayer cuál será a partir de ahora la posición del partido sobre la controvertida propuesta de ordenanza sobre animales de compañía: respetar el proceso de participación impulsado en el municipio de El Rosario, cuyo fin es que todas las partes implicadas y la ciudadanía en general pueden manifestar su sentir sobre la normativa que les va a afectar.

En su reunión de ayer, en la que también se trataron cuestiones relacionadas con la campaña electoral, el órgano de gestión de los socialistas rosarieros descartó así apoyar la aprobación de la ordenanza en su redacción actual.

La posición de la gestora choca con la línea que ha tratado de seguir el que fue su candidato a la Alcaldía, José Antonio Estévez, encargado durante el último mandato de Macario Benítez de coordinar los trabajos de elaboración de la citada norma, que actualizaría la que está en vigor.

Precisamente, Estévez dijo ayer que "asumirá" la línea de su partido, en relación con la polémica ordenanza, "por disciplina", aunque reconoció que habrá "discrepancias".

Estévez, que este martes se sumó a una petición en Change.org para que la ordenanza se apruebe en los términos en los que está redactada, sin tener el consenso de todos los colectivos afectados, dijo ayer que "lo mejor" es que se sienten a negociar todas las partes para solventar las diferencias.

El edil del PSOE -apartado de la Portavocía de su grupo, una decisión que tiene recurrida-, recordó que cuando se comenzó a elaborar la ordenanza, hace dos años, participaron todos los partidos, con y sin representación en el pleno.

Sin embargo, cuando llegó la hora de llevarla a pleno, y ante la falta de mayoría para aprobarla, se decidió posponerla.

Cabe recordar que exediles socialistas como Abel Acosta no compartían cómo estaba redactado el documento, pues entendía que se discriminaba a los cazadores, un colectivo con el que se siente identificado.

Según José Antonio Estévez, la idea que barajaron en su momento era que las modificaciones al texto, dado que desde el principio había sugerencias, se hicieran una vez aprobado por el pleno, vía alegaciones, cuestión que no fue posible al quedarse sobre la mesa.