LA GOMERA puede presumir de tener unas infraestructuras y un paisaje natural digno de admiración, a partir del cual ha desarrollado una magnífica red de senderos y miradores.

Desde hace tiempo se hacía necesario poner en marcha un estudio serio y detallado de estas infraestructuras, que nos permita proyectar mejor el futuro de cara a aprovechar las oportunidades que nos ofrece esta riqueza insular. También sería conveniente que abordáramos lo antes posible el proyecto de albergues, aunque sabemos que es un tema delicado, puesto que no existe una legislación clara sobre el asunto. Es importante, en todo caso, que todas las administraciones nos pongamos en marcha para ofrecer a los gomeros y a nuestros visitantes las mejores infraestructuras en todo el territorio gomero, ya que todas ellas tienen un interés singular.

Desde el Consistorio municipal de Agulo, esperamos que se fije el protocolo a seguir, pues sólo tenemos información a través de los medios de comunicación y de las reuniones de coordinación para el desarrollo de la Carta Europea. En este asunto debemos ser especialmente cuidadosos en cuanto a las responsabilidades de cada uno, ya que, aunque sea interesante la rehabilitación o acondicionamiento de los senderos, más delicado va a ser el modelo de gestión de los mismos y el tiempo de dependencia. Debe quedar claro que, lejos de los protagonismos, lo importante es trabajar para ofrecer las mejores infraestructuras.

Hemos de apoyar una imagen común que represente a los senderos de La Gomera, pero sin herir sensibilidades municipales, ya que los ayuntamientos siguen siendo los principales responsables en esta materia.

En esta línea, creo que sería interesante que entre todos podamos incluso plantear la creación de un módulo de Formación Profesional de guías profesionales que se encargaran de estos itinerarios. Habría que establecer las bases para crear una nueva fuente de ingresos que permitan, por un lado, pagar al personal cualificado y, por otro, asegurar el mantenimiento de los espacios de la Red.

Personalmente, me preocupa el proyecto, no porque dude de que se pueda poner en marcha, sino por los altos costes que va a suponer el mantenimiento. En todo caso, espero que pronto comiencen las reuniones para coordinarnos y que los técnicos encargados de este trabajo y los políticos asignados estén a la altura. Nos jugamos mucho.