El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha reiterado este viernes a su homólogo estadounidense, Donald Trump, su voluntad de entablar un diálogo para avanzar hacia una relación bilateral "de trabajo, cooperación y respeto", a pesar de los duros reproches que se han cruzado ambos gobiernos.

En una entrevista concedida a Univisión que se difundió el jueves por la noche (hora local), Maduro aseguró se mostró dispuesto a iniciar "un diálogo franco, directo, cara a cara", con Trump. "Más temprano que tarde estamos obligados a hablar y entendernos", dijo.

Maduro cree que Trump ha heredado "los errores" de la anterior Administración de Barack Obama en torno a Venezuela y está convencido de que con estos eventuales contactos se daría cuenta de que "no es lo que le dicen sus informantes". "Somos de verdad, somos gente con la que se puede hablar, negociar y acordar", defendió.

El líder ''chavista'' incluso extendió directamente una invitación al secretario de Estado, Mike Pompeo, para que visite Venezuela, país que ha quedado excluido de todos los viajes que el jefe de la diplomacia estadounidense y el vicepresidente, Mike Pence, han hecho a la región.

"¿No podemos lograr una relación con Venezuela y América Latina que sea de trabajo, cooperación y respeto?", planteó el inquilino del Palacio de Miraflores.

Maduro ya ha expresado en anteriores ocasiones su disposición a hablar con Trump sin que haya obtenido respuesta. Entretanto, ha acusado a la Casa Blanca de conspirar para derrocar a su Gobierno y la Administración estadounidense le ha tachado de "dictador" y ha apelado directamente a los militares venezolanos.

CRISIS POLÍTICA

La crisis política en Venezuela se agudizó el 10 de enero, cuando Maduro inició un segundo mandato de seis años conforme a las elecciones presidenciales del pasado 20 de mayo. Ni la oposición ni gran parte de la comunidad internacional reconocen este nuevo mandato por considerar que se basa en un proceso electoral fraudulento.

Varios países de la región, la mayoría miembros del Grupo de Lima, así como Estados Unidos y Canadá, comunicaron el mismo día de la toma de posesión de Maduro que no reconocen su segundo mandato, aunque hasta ahora solo Paraguay ha roto relaciones con Venezuela.

Para los detractores de Maduro, desde el 10 de enero la única institución legítima en Venezuela es la Asamblea Nacional, renovada en las elecciones legislativas de 2015, que fueron reconocidas como válidas por el Gobierno y la oposición y que dieron la mayoría parlamentaria a esta última.

Fuentes consultadas por CNN han avanzado que el presidente estadounidense, Donald Trump, sopesa reconocer al jefe del Parlamento, Juan Guaidó, como único presidente legítimo de Venezuela. Este paso abriría la puerta a una sucesión de declaraciones en el mismo sentido que pondrían muy difícil a Maduro seguir adelante con este segundo mandato.