El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, describió la actual parálisis del Gobierno federal, por la que miles de funcionarios no han recibido su paga por la incapacidad para alcanzar un acuerdo presupuestario, como una "huelga" durante una reunión privada mantenida este pasado viernes con los líderes demócratas en el nuevo Congreso de EEUU.

En una perorata que duró aproximadamente 15 minutos, Trump amenazó con mantener al Gobierno paralizado durante "años", según varias fuentes presentes en la reunión al portal estadounidense ''The Daily Beast''.

También acusó a los demócratas de haber iniciado una persecución política contra él e incluso denunció ante la nueva presidenta de la cámara baja, la demócrata Nancy Pelosi, a la nueva congresista demócrata Rashida Tlaib, grabada cuando gritó en una fiesta a principios de semana "Vamos a hacer un ''impeachment'' (destitución) a ese hijo de puta", en relación al presidente.

Por otra parte, el vicepresidente de Trump, Mike Pence, y otros cargos de la Casa Blanca han mantenido este sábado contactos con los demócratas para intentar lograr un acuerdo sobre el muro fronterizo. Antes de este encuentro Pence ha publicado un tuit en el que subraya que el objetivo no es solo acabar con la parálisis, sino "conseguir financiación para poner fin a la crisis en la frontera sur, para conseguir una seguridad real y construir el muro".

En la cita, celebrada en la Casa Blanca, también ha estado el yerno de Trump, Jared Kushner, la secretaria de Seguridad Interior, Kirstjen Nielsen, y el jefe de gabinete en funciones, Mick Mulvaney.

El Gobierno estadounidense funciona a medio gas desde el pasado 22 de diciembre porque el Congreso, tanto los demócratas como algunos republicanos, se ha negado a liberar 5.000 millones de dólares para construir el polémico muro, haciendo naufragar así el acuerdo sobre el nuevo techo de gasto.

Trump se vio el miércoles con los líderes de ambos partidos en el Congreso y este viernes lo ha vuelto a intentar, a pesar de que los demócratas aprobaron el jueves un paquete legislativo que contempla los fondos necesarios para reactivar el Gobierno y una partida especial para seguridad fronteriza, pero no el muro.