El ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, recordó hoy a Italia que las normas europeas de disciplina presupuestaria son las mismas para todos los países de la eurozona y que la situación en uno de ellos puede afectar al resto, puesto que sus "futuros están ligados".

"Quiero ser muy claro en que hay reglas, y las reglas son las mismas para todos los Estados, porque nuestros futuros están ligados", dijo en una rueda de prensa previa a la reunión del Eurogrupo, que se celebra hoy en Luxemburgo, al ser preguntado por la decisión del Gobierno italiano de elevar su déficit anual al 2,4 % del producto interior bruto (PIB) en el próximo trienio.

El ministro destacó que el Gobierno francés ha tomado "medidas muy difíciles para cumplir con las reglas europeas", reduciendo su gasto y deuda públicos.

Su país, dijo, no lo ha hecho "para obtener la luz verde" de la Comisión Europea, sino por el convencimiento de que aplicar ciertas reformas laborales o tributarias será "bueno" y "eficiente" para la economía francesa.

Le Maire puntualizó, no obstante, que depende de la Comisión Europea hacer la evaluación del presupuesto italiano y que los Estados miembros confiarán en su análisis.

Preguntado sobre si la situación en Italia podría afectar a la estabilidad financiera del conjunto de la eurozona, Le Maire se limitó a señalar que "cuando todos los Estados miembros hacen todo lo posible para cumplir sus compromisos europeos, esto lleva al refuerzo de la eurozona".

En este sentido, insistió en que si la eurozona quiere ser capaz de afrontar una nueva crisis financiera, "todos los Estados miembros tienen que hacer un buen trabajo para tener una situación nacional mejor y, al final, un refuerzo global de la eurozona".

Por su parte, el presidente del Eurogrupo, Mário Centeno, aseguró que Italia "está en la mente de todos", si bien reconoció que la política presupuestaria de Roma no figura en la agenda de la reunión de titulares económicos de la eurozona de este lunes.

Aun así, admitió que todos los países tienen preguntas sobre los anuncios italianos y esperan respuestas, pero añadió que los detalles del plan presupuestario aún se deben presentar.

"Debemos esperar que esto ocurra y después que la Comisión emita su opinión. Es muy importante entender que el proceso presupuestario es largo", declaró, para después señalar que todavía están teniendo lugar negociaciones en Roma.

Subrayó, además, que Italia es un país "importantísimo" del área del euro y que por ese motivo deben permanecer "atentos" a lo que sucede en ese Estado.

En la misma línea, el ministro de Finanzas holandés, Wopke Hoesktra, dijo que las señales que llegan de Roma "no son muy tranquilizadoras", pero los socios deben esperar a conocer todos los detalles del presupuesto.

"Después, depende de la Comisión hacer un juicio justo teniendo en cuenta las reglas que nos hemos dado y el interés de Italia, pero también el de la Unión Europea en su conjunto", añadió.

El ministro de Finanzas finlandés, Peteri Orpo, admitió que en su país siguen "con mucho cuidado" la situación y están "un poco preocupados", pero subrayó que el Gobierno italiano "sabe lo que tiene que hacer".

Su homólogo luxemburgués, Pierre Gramegna, sin embargo, instó a "desdramatizar" la situación hasta conocer los detalles y señaló que el déficit seguirá por debajo del 3 % del PIB considerado excesivo.

El Gobierno de Italia anunció el pasado jueves que elevará el déficit público al 2,4 % del PIB en el trienio 2019-2021, muy por encima de los objetivos previstos por el anterior Ejecutivo demócrata (0,8 % en 2019 y 2020, y 0,2 % en 2021) y del 1,6 % que hubiera preferido su ministro de Economía, Giovanni Tria.