Arabia Saudí ha detenido todos los programas de tratamiento médico en Canadá y está coordinando el traslado de todos los pacientes saudíes de hospitales canadienses a otros fuera de Canadá, según ha informado este miércoles la agencia de noticias saudí.

La crisis bilateral tiene su origen en una declaración publicada el pasado 3 de agosto por el Ministerio de Exteriores de Canadá en la que dice que "está gravemente preocupado por las detenciones en la sociedad civil y los activistas por los derechos de las mujeres en Arabia Saudí".

Arabia Saudí ha respondido expulsando al embajador de Canadá en Riad, Dennis Horak, y congelando las relaciones económicas y comerciales por "interferir en asuntos de Estado". El ministro de Exteriores, Adel al Jubeir, ha avanzado que su Gobierno responderá "con toda la firmeza".

La aerolínea estatal Saudia ha anunciado la suspensión de todos sus vuelos con origen y destino en Toronto y se han suspendido también los programas de intercambio académico entre ambos países.

La ministra de Exteriores canadiense, Chrystia Freeland, ha contestado que "Canadá siempre defenderá los Derechos Humanos en Canadá y en el resto del mundo". "Y los derechos de las mujeres son Derechos Humanos", ha enfatizado.