La ONU reclamó hoy "moderación" a los líderes políticos de Zimbabue y a la población del país a la espera de que se den a conocer los resultados oficiales de las elecciones del lunes.

El portavoz Farhan Haq señaló que Naciones Unidas está siguiendo la situación en el país africano, donde al menos tres personas murieron hoy en protestas violentas por un supuesto fraude electoral, que fueron reprimidas por el Ejército y la Policía.

"Llamamos a los líderes políticos y al conjunto de la población a ejercer moderación y a rechazar cualquier forma de violencia mientras esperan la resolución de las disputas y el anuncio de los resultados de las elecciones", dijo Haq preguntado por los periodistas en una conferencia de prensa.

La ONU recordó además a las autoridades y a los partidos políticos que deben cumplir con los compromisos que sellaron para asegurar un proceso electoral pacífico.

El principal candidato opositor, Nelson Chamisa, se declaró este martes ganador de los comicios del lunes citando un recuento paralelo al oficial, a la espera de los resultados formales.

Hoy, Chamisa acusó a la Comisión Electoral (ZEC) de estar retrasando su publicación con el fin de preparar a la población para "aceptar resultados presidenciales falsos".

Cientos de seguidores del opositor Movimiento por el Cambio Democrático (MDC) tomaron hoy las calles del centro de la capital, Harare, su mayor bastión, para protestar por ese retraso en el anuncio de resultados, en los que denuncian fraude contra el que consideran el auténtico ganador, Chamisa.

La cadena de televisión estatal ZBC confirmó la muerte de al menos tres personas en unas protestas en las que, según medios locales, los militares usaron munición real para dispersar a los manifestantes.

Las elecciones son históricas en Zimbabue por ser las primeras desde la independencia (1980) a las que no concurre Robert Mugabe, quien gobernó el país desde ese mismo año hasta su forzada dimisión por un golpe militar el pasado noviembre.

El presidente del país y candidato de la ZANU-PF, Emmerson Mnangagwa, busca en los comicios la legitimidad de las urnas tras acceder al poder con ese derrocamiento.