El Gobierno iraní denunció hoy la "propaganda ridícula" del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y aseguró que las revelaciones sobre un supuesto programa nuclear secreto solo buscan presentar a Irán como una amenaza.

"Los líderes del régimen sionista de Israel ven su supervivencia en el uso de charlatanería para mostrar a otros países como una amenaza", subrayó el portavoz del Ministerio de Exteriores, Bahram Qasemí, en un comunicado.

El portavoz insistió en que las declaraciones de Netanyahu son la última de "una serie repetitiva de juicios no profesionales y vergonzosos y de esfuerzos infructuosos de un mentiroso escandaloso".

Netanyahu presentó ayer lo que aseguró que son las copias de documentos iraníes originales obtenidos por los servicios de inteligencia, a los que se refirió como el "archivo atómico secreto iraní", que estaría oculto en un almacén en el distrito de Shorabad, en el sur de Teherán.

El primer ministro israelí aseguró que Irán guarda en secreto material de ese programa nuclear llamado Proyecto Amad "para utilizarlo cuando quiera para desarrollar armas nucleares".

Poco después, el presidente estadounidense, Donald Trump, respaldó la denuncia de Netanyahu e insinuó que planea retirarse del acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Irán y el Grupo 5+1 (EEUU, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania).

"Lo que hemos aprendido hoy sobre Irán demuestra realmente que yo tenía la razón al 100 %" sobre el acuerdo nuclear de 2015", aseveró Trump, quien debe anunciar el 12 de mayo si EEUU abandona o no el pacto.

Por ello, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, criticó en un tuit horas después de la presentación de Netanyahu que las "supuestas revelaciones de inteligencia" favorecen al presidente estadounidense.

"Qué conveniente. Trump está saltando sobre una repetición de viejas acusaciones ya tratadas por el OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) para acabar con el pacto", agregó Zarif.

El OIEA ha ratificado en una decena de ocasiones que Teherán está cumpliendo con sus compromisos, pero Trump está presionando a sus socios europeos para negociar un pacto suplementario que imponga más restricciones a Irán.

Ese nuevo pacto buscaría bloquear la actividad nuclear de Teherán "a largo plazo" y limitar tanto su sistema de misiles balísticos como su influencia en la región.

El acuerdo nuclear de 2015 limita el programa atómico de Teherán a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales, pero no incluye ninguna referencia a las armas convencionales o a la política exterior de la República Islámica, que se niega por su parte a negociar sobre estos puntos.