El presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, afirma que el supuesto golpe de Estado contra su régimen, desbaratado las pasadas Navidades, fue financiado por "ciertas personalidades" en Francia.

En una entrevista divulgada hoy por "France 24" y "RFI", Obiang dijo no poder citar de momento el nombre de los implicados y pidió apoyo a las autoridades francesas para la investigación.

Sin utilizar el término de golpe de Estado, explicó que en la operación participaron "terroristas" de Chad, de la República Centroafricana y de Sudán que contaban con la connivencia de ecuatoguineanos.

Contó que advirtió a Paul Biya, el presidente de Camerún, por cuya frontera iban a penetrar en Guinea Ecuatorial, y que ambos países iniciaron una acción conjunta que permitió que "fracasara la operación de los mercenarios, de los terroristas".

Preguntado sobre si sospecha que el presidente de Chad, Idriss Deby, estuvo al corriente de los preparativos y no los detuvo, respondió que lo único que sabe es que su "reclutamiento" tuvo lugar allí y que el Ejecutivo chadiano debería investigarlo.

Obiang Nguema subrayó que "la mayoría (de los organizadores) son personalidades conocidas" en Chad y que las autoridades de ese país deberían saber cómo salieron de allí para llegar hasta Guinea Ecuatorial.

Rechazó además de plano las acusaciones de reprimir a los militantes del partido Ciudadanos por la Innovación, el único de la oposición con representación parlamentaria tras las elecciones legislativas de noviembre pasado (uno solo de los 100 diputados).

Obiang Nguema rebajó a una veintena la cifra de más de 200 militantes detenidos denunciada por ese partido, y aunque confirmó la muerte el pasado fin de semana de Santiago Ebe Ela, uno de los arrestados, insistió en que estaba "enfermo" y en que no fue torturado en una comisaría de Malabo, como sostiene Ciudadanos por la Innovación.

A la cuestión de si cumplirá su promesa de no volverse a presentar para un nuevo mandato cuando en 2023 termine el actual, puntualizó que había anunciado que está "listo para dejarlo" porque ha "trabajado mucho", pero que "no decía que no sería candidato".

El presidente ecuatoguineano se quejó además de que su hijo, el vicepresidente Teodoro Nguema Obiang Mangue, "Teodorín", fuera condenado el pasado octubre en Francia por blanqueo de dinero procedente de la corrupción en su propio país y señaló que la justicia francesa "no tiene derecho" a juzgarlo.