Siete personas murieron en una explosión ocurrida anoche en una fábrica de fuegos artificiales en la comarca de Shangli, en el este de China, informó hoy la agencia estatal de noticias Xinhua.

Las autoridades comarcales aseguraron que se había ordenado la suspensión de la producción de esta planta el viernes por la mañana debido a problemas de seguridad detectados, aunque la fábrica desoyó la advertencia y siguió con su actividad normal.

De momento se desconoce qué originó la explosión, aunque las autoridades siguen investigando el suceso.

En Shangli, en la provincia de Jiangxi, son frecuentes las ventas de cohetes y petardos para celebrar las fiestas locales siguiendo las costumbres de la tradición china.

El sector de los fuegos artificiales en esta zona han sufrido numerosos accidentes mortales en los últimos años, uno de los más grave ocurrió en el 2001, cuando 42 personas, la mayoría niños, murieron en su escuela al explotar la fábrica de petardos que operaba dentro del recinto.