La Gendarmería marroquí ha interceptado una patera con 55 personas a bordo en el mar de Alborán y los obligó a regresar hasta Alhucemas, dijeron hoy fuentes de este cuerpo policial.

Los 55 pasajeros, todos ellos subsaharianos (mayormente de Mali, Costa de Marfil y Níger) y entre los que se encontraban mujeres y niños en número no precisado, fueron localizados ayer en aguas situadas entre las ciudades de Alhucemas y Nador.

Tras ser conducidos al puerto de Alhucemas e interrogados, fueron después trasladados a destino desconocido.

Oficialmente, ninguna fuente ha informado de este último suceso, como tampoco ha habido ninguna información sobre el hecho de que durante los tres últimos meses ha habido un repunte del tráfico de pateras desde el norte de Marruecos, y con especial incidencia en las costas de Alhucemas, la capital del Rif.

Del mismo modo, no ha habido ninguna explicación en Marruecos al probable naufragio esta misma semana de una patera precisamente en el mar de Alborán, en el que se sospecha que han muerto 49 subsaharianos, pese a que ha sido la tragedia más grave de las vividas en los últimos años.

Tradicionalmente, las pateras salían sobre todo desde las costas del Estrecho (entre Tánger y Tetuán), ya que desde allí la distancia hasta las costas de España es mucho más corta (entre 15 y 20 kilómetros), mientras que desde Alhucemas hasta las costas de Almería o Granada cuesta varias horas más.