En medio de un clima de crispación creciente, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y la oposición ofrecieron sendas ruedas de prensa en las que el Gobierno reiteró que se protege contra un supuesto golpe de Estado y la oposición pidió "desconocer" esos escudos y trabajar para revocar al mandatario.

Maduro informó de que su Gobierno se prepara para hacer frente "a la peor agresión" que ha sufrido el país en la última década, una declaración que hizo un día después de que se oficializara el llamado decreto de "estado de excepción y emergencia económica" que dictó el viernes pasado y que fue oficializado ayer.

Según el mandatario, su Administración es "víctima" de una agresión "mediática, política, diplomática" que no solo se desarrolla en forma de planes concretos de golpe de Estado sino también con una campaña mediática internacional de odio.

Maduro reiteró la denuncia de una llamada a "una intervención militar" que el expresidente colombiano Álvaro Uribe supuestamente hizo hace menos de una semana desde Estados Unidos, y que, entre otros asuntos, le ha llevado a decretar el estado de excepción.

En este sentido, aseguró que un avión militar estadounidense "con capacidades técnicas letales" diseñado para labores de espionaje inusuales ingresó ilegalmente en el espacio aéreo venezolano en dos ocasiones en la última semana.

Indicó que las maniobras de este avión extranjero, que fueron interceptadas por la Fuerza Aérea venezolana que lo obligó a abandonar el territorio, "van a ser protestadas severamente ante el Gobierno de Estados Unidos".

Ese golpe de Estado que denuncia estaría siendo promovido por la oposición venezolana, a la que acusó de no querer hacer un referendo revocatorio, sino derrocarlo con acciones desestabilizadoras en manifestaciones en la calle y desde el Parlamento dominado por la opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD).

Reiteró que "ninguna de las opciones" que ha anunciado la oposición para acabar con "la revolución" que encabeza tiene "viabilidad política" y aseguró que "ninguna va a tener éxito" en referencia al revocatorio.

Dijo que las firmas que la oposición entregó ante el Poder Electoral el pasado 2 de mayo para activar el revocatorio son "un desastre" y que el jefe de la comisión que designó la Presidencia para analizar esas rúbricas, Jorge Rodríguez, presentará las pruebas de ese supuesto fraude cometido por la oposición.

"Todos los que han firmado como responsables de esas firmas tienen responsabilidad jurídica, penal y administrativa y nosotros vamos a accionar con todo el poder de la justicia", dijo al reiterar que la oposición intenta hacer fraude y que será demandada judicialmente.

Asimismo aseguró que la Asamblea Nacional "perdió vigencia política" y que "es cuestión de tiempo para que desaparezca" pues se ha desconectado "de los intereses nacionales" tras manifestar su certeza de que la oposición parlamentaria no aprobará el decreto de emergencia económica y estado de excepción.

Horas más tarde la Cámara, con mayoría opositora, rechazó el decreto tras calificarlo de "inconstitucional" como ya lo había adelantado antes el dos veces candidato a la Presidencia Henrique Capriles en rueda de prensa que pidió "desconocer" la norma en caso de que el Gobierno se empeñe en aplicarlo.

El presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, consideró durante la discusión que "este Gobierno está en una situación muy comprometida, muy frágil y muy endeble y tiene que hacer mano de un disparate como este (...) para tratar de simular que tiene fuerza para mantenerse en el poder".

El diputado chavista Elías Jaua defendió la norma y acusó a la bancada opositora de legislar sin el pueblo al tiempo que aseguró que con este decreto, Maduro está evitando una "guerra civil" que, dijo, la oposición y "el imperialismo" promueven.

Capriles advirtió más temprano que "si la Asamblea Nacional rechaza este decreto y el Gobierno igualito quiere aplicarlo" los venezolanos deben "desconocerlo".

Señaló que este decreto "se presta para cualquier cosa" y que si Maduro lo quiere aplicar debe ir "preparando los tanques de guerra" para sacarlos a la calle "porque va a tener que aplicarlo por la vía de fuerza".

Además, pidió a los miembros de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) decidir si están con la Constitución o con Maduro.

"Esa será una decisión que le corresponderá a la FANB tomar, nosotros no queremos solución militar, por algo estamos buscando el revocatorio, la solución democrática", dijo tras reiterar la invitación a marchar mañana para presionar al Poder Electoral para que active el revocatorio.