EEUU, Rusia, la UE, Turquía, Irán y Arabia Saudí se reúnen hoy en Múnich (sur de Alemania) para tratar de reactivar las conversaciones de paz en Siria, suspendidas la semana pasada por el abandono de la oposición, que denunció los avances del régimen gracias a los bombardeos rusos.

"Llegamos a este encuentro en Múnich con grandes esperanzas (...). Es un encuentro que dirá mucho sobre el camino que queda por recorrer" en Siria, ha asegurado sobre la reunión el secretario de Estado de EEUU, John Kerry.

El Grupo Internacional de Apoyo a Siria se ha citado en Alemania dada la urgencia de la situación sobre el terreno y aprovechando que todos sus miembros tienen previsto participar, a partir de mañana, en la Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC), el llamado "Davos de la defensa".

La reunión del grupo, de nivel ministerial, se centrará en la gran ofensiva lanzada sobre la ciudad de Alepo por las tropas del presidente sirio, Bachar al Asad, con el apoyo aéreo de Rusia.

Esta acción está debilitando a la oposición moderada -respaldada por Occidente- y ha provocado la huida decenas de miles de personas hacia la frontera turca, ahondando aún más la gravedad de la crisis de los refugiados.

Kerry ha acusado a Rusia de hacer "mucho más difícil" el inicio de una verdadera negociación de paz en Siria por sus acciones en Alepo y ha instado a Moscú a presionar a Asad para lograr un alto el fuego inmediato en ese país.

El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, mantuvo ayer una conversación telefónica con Kerry, de la que sólo trascendió, por parte de Moscú, que ambos estaban de acuerdo en "la necesidad de alcanzar cuanto antes un alto el fuego y garantizar el acceso humanitario a todos las poblaciones sitiadas".

El Gobierno alemán, que actúa de anfitrión, ha abogado por recuperar las negociaciones multilaterales para consensuar una "solución política" al conflicto, a su juicio la única salida viable, pero no ha dudado en criticar la actuación de Moscú.

El ministro de Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, confió ayer en declaraciones al grupo de medios RedaktionsNetzwerk que la reunión sirva para bosquejar un "enfoque común" en la lucha contra el enemigo de todas las partes: el Estado Islámico.

Además, consideró Steinmeier, "no se puede lograr una solución para Siria a bombazos", en relación a la actividad rusa en el país.

Según informó en un comunicado el Ministerio de Exteriores alemán, en Múnich se darán cita representantes de la Liga Árabe, la UE, la ONU, Rusia, Irán, Arabia Saudí, Estados Unidos, Turquía, Egipto, China, Alemania, Francia, Reino Unido, Irak, Jordania, Líbano, Omán, Catar y Emiratos Árabes.

La MSC, de alguna forma, será la continuación de los contactos multilaterales sobre Siria, ya que sus tres vertientes -la crisis de los refugiados, la guerra civil y el EI- son el plato fuerte de este tradicional encuentro, que en esta edición cuenta con 25 jefes de Estado y Gobierno y más de 60 ministros de Exteriores y Defensa.

El presidente de la MSC, Wolfgang Ischinger, indicó recientemente que la guerra en Siria y, en un contexto más amplio, los problemas en Oriente medio y el enfrentamiento latente entre Arabia Saudí e Irán serán "un hilo conductor a lo largo de toda la conferencia".

Otros asuntos que formarán parte de las ponencias y las conversaciones en la MSC serán la falta de avances en el conflicto ucraniano, la inestabilidad económica en China y su creciente influencia, las diferencias entre la OTAN y Rusia,

Además de Kerry y Lavrov, en Múnich estarán personajes clave de crisis candentes como el presidente ucraniano, Petró Poroshenko; el rey Abdalá II de Jordania, el presidente iraquí, Fuad Masum, y el ministro de Exteriores saudí, Adel al Jubeir.