Latinoamérica debe crecer a un ritmo del 4,5 % anual en media para generar el dinamismo económico suficiente que le permita mantener sus políticas sociales, dijo hoy el presidente ejecutivo del banco de desarrollo de América Latina (CAF), Enrique García.

"Si la región quiere converger con los países industrializados en los próximos 35 años y al mismo tiempo mantener las exitosas políticas sociales no podemos estar contentos con un crecimiento del 2,5 y el 3 %; debemos crecer al 4,5 % y no con un modelo tan volátil", manifestó.

García participó hoy en la ciudad colombiana de Cartagena en la presentación del informe "Perspectivas económicas de América Latina 2016. Hacia una nueva asociación con China", elaborado en conjunto por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el CAF.

El informe recomienda a los países latinoamericanos "mejorar y profundizar" su relación con China para enfrentar los desafíos que suponen el desplazamiento del "centro de gravedad" mundial desde las economías desarrolladas a las emergentes y los cambios en el modelo de consumo del gigante asiático.

La presentación del estudio forma parte de las actividades previas a la reunión de ministros de Exteriores de Iberoamérica, que mañana se darán cita en Cartagena para presentar la temática de la XXV Cumbre Iberoamericana, que se celebrará el año próximo en Colombia y tendrá como eje "Juventud, Emprendimiento y Educación".

García recordó que los países de la región pasaron de estar acostumbrados a un crecimiento por encima del 4,5 % a un decrecimiento del 0,3 % este año en media, principalmente por las contracciones de Brasil, Argentina y Venezuela, cuyas economías tienen un gran peso regional, aunque para 2016 se espera un nuevo crecimiento, pero bajo.

"La perspectiva de tres o cuatro años no es de las más favorables. El crecimiento se va a mantener por debajo del 3 %", agregó.

El presidente del CAF atribuyó la volatilidad económica a que la región no aprovechó la época de las "vacas gordas" de los últimos años y tiene "temas estructurales pendientes".

"Tenemos que hacer una transformación productiva de un modelo más tradicional de ventajas comparativas -materias primas y bajos salarios- a un modelo de ventajas competitivas basado en la tecnología, la educación y la innovación", explicó.

En la presentación del estudio también participaron la secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena; el director del Centro de Desarrollo de la OCDE, Mario Pezzini; la titular de la Secretaría General Iberoamericana (Segib), Rebeca Grynspan, y la canciller colombiana, María Ángela Holguín.

García añadió que, en resumen, "la región tiene que estar muy consciente de que los vientos han cambiado y (la situación actual) no es consistente para mantener los éxitos sociales".