El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, y la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmstrom, visitan hoy la isla italiana de Lampedusa tras el naufragio de un barco con 500 inmigrantes, de los cuales murieron al menos 289.

Una visita a la que participarán también el primer ministro italiano, Enrico Letta, y que se produce después de que Italia haya pedido responsabilidades a la Unión Europea (UE) para contrastar la llegada de inmigrantes y evitar que se vuelvan a producir estas tragedias.

En la reunión del Consejo de Ministros de Interior de la UE que se celebró ayer en Luxemburgo, se apoyó la creación de un grupo de trabajo para estudiar la manera de frenar la llegada de inmigrantes irregulares a través del mar.

Un objetivo será dotar de más medios a la agencia europea para la Gestión de Control de las Fronteras Exteriores (Frontex) para que vigile las aguas desde Chipre hasta España.

El Gobierno italiano había pedido además de ayuda para controlar las fronteras también modificar los acuerdos de Dublín (Convención de Dublín), sobre los cupos de ingreso de inmigrantes.

Los representantes de la UE podrán observar las tareas de rescate de las decenas de cuerpos aún atrapados en el casco del pesquero que se hundió el pasado jueves frente a las costas de Lampedusa.

Hasta el momento se han recuperado 289 cuerpos y se cree que quedan otros 70 bajo el mar ya que, según los 155 supervivientes, en el pesquero que salió de Libia viajaban unos 520 inmigrantes.

Otra visita será la del centro de acogida de inmigrantes de la isla que se encuentra completamente colapsado ya que aloja a más de 1.000 personas, entre ellos decenas de menores, y solo tiene capacidad para 300.

Los inmigrantes efectuaron anoche una protesta ante los medios de comunicación presentes para mostrarles las condiciones infrahumanas en las que se encuentran ya que duermen a la intemperie a pesar del frío y la lluvia.

Barroso saludará también a la alcaldesa de la isla siciliana, Giusi Nicolini, que desde su elección en 2012 ha enviado varias cartas -que no han recibido respuesta- a la Unión Europea para pedir ayuda ante la situación de Lampedusa.

La alcaldesa afirmaba ayer que si la visita de los representantes europeos es sólo de "cortesía" para expresar su pésame tras la tragedia y no traen soluciones "es mejor que manden un telegrama".