La mayoría de los casi 400.000 empleados del Departamento de Defensa de EEUU, suspendidos tras el cierre parcial del Gobierno Federal, retornó ayer a sus labores sin saber cuándo cobrarán los sueldos por los días perdidos. La Cámara de Representantes aprobó el sábado una medida que retribuirá a los empleados públicos suspendidos, pero el Senado no ha votado la propuesta.

Mientras, se esperaba que ayer el Congreso reanudara sus deliberaciones cuando se cumplen siete días del cierre del Gobierno Federal. El jefe del Pentágono, Chuck Hagel, ordenó la reincorporación de los empleados después de que el Congreso aprobara el pago de sueldos a los trabajadores federales suspendidos de sus labores desde el 1 de octubre.

Pero la paralización del Gobierno Federal continúa como resultado de la negativa de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes a asignar fondos para el funcionamiento de la administración tras el fin del período fiscal 2013.

La disputa sobre los fondos para el Gobierno Federal se agrava día a día al aproximarse el plazo del 17 de octubre, cuando el gobierno se quedará sin dinero para el pago de sus deudas si los republicanos no ceden en su negativa a aprobar un aumento del límite del endeudamiento nacional.