La Comisión Europea (CE) pidió hoy redoblar los esfuerzos contra los traficantes que explotan la "desesperación" de inmigrantes indocumentados, a raíz de la muerte de al menos 82 inmigrantes y la desaparición de más de 250 tras el naufragio de una barcaza que intentaba llegar a Italia.

"Estoy horrorizada por la tragedia de Lampedusa", señaló la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, en un mensaje de la red social Twitter, en el que dijo que sus pensamientos están con las víctimas y sus familias.

"Tenemos que redoblar los esfuerzos para luchar contra los traficantes que explotan la desesperación humana", recalcó.

Por su parte, el comisario europeo de Política Regional, Johannes Hahn, expresó en una rueda de prensa la "tristeza" de la Comisión Europea (CE) por la "tragedia" que está teniendo lugar en Lampedusa.

Ésta y el hecho de que hayan viajado en la barcaza niños, "es algo sobre lo que Europa tiene que estar realmente triste", agregó, al tiempo que subrayó que la UE tiene que "ver cómo mejoramos esta situación" de los inmigrantes indocumentados que ponen en riesgo sus vidas en busca de una vida mejor.

Hahn recalcó que todos en Europa son responsables antes estos sucesos.

También el portavoz de Malmström, Michele Cercone, defendió la necesidad de que la UE "abra más canales legales para los que llegan".

Cercone instó a los Estados miembros a combatir las redes de tráfico de personas y contrabando y, a largo plazo, a "aumentar los esfuerzos y cooperar en el dialogo con terceros países" y "hacer más" para reasentar a los inmigrantes que llegan a los Veintiocho.

Al menos 82 inmigrantes indocumentados han muerto y más de 250 están desaparecidos en el naufragio de una barcaza hoy en la que viajaban unas 500 personas y que intentaba llegar a la isla italiana de Lampedusa, al sur de Sicilia.

Entre los fallecidos hay dos niños de pocos años y una mujer embarazada.

Los inmigrantes que han sobrevivido al naufragio han explicado que proceden de Eritrea y Somalia, que eran entre 450 y 500, y que habían salido de las costas de Libia.

Durante la noche había llegado a la isla una barcaza con 463 inmigrantes indocumentados a bordo que fueron trasladados al centro de acogida de Lampedusa, que empieza a desbordarse dado que ayer estaba ya al máximo de su capacidad (700 personas).

Se trata de una nueva tragedia de la inmigración en las últimas semanas, después de que 13 indocumentados fallecieran el pasado 30 de septiembre tras haber sido obligados por los traficantes a saltar de la barcaza en la que viajaban a pesar de que no sabían nadar y había un fuerte oleaje.

El pasado 10 de agosto, otros seis indocumentados, entre ellos un menor de edad, perdieron la vida al intentar alcanzar a nado la costa de Sicilia tras haber encallado el pesquero en el que viajaban junto a un centenar de inmigrantes procedentes de Siria y Egipto.