El alcalde de la ciudad de Nueva York, Michael Bloomberg, ordenó ayer la evacuación obligatoria de todas las personas que vivan en áreas localizadas bajo el nivel del mar, lo que afecta a unos 250.000 neoyorquinos, ante la llegada a la costa este de EEUU del huracán Irene.

"Nunca antes habíamos decretado la evacuación obligatoria y no lo estaríamos haciendo ahora si no creyéramos que esta tormenta tiene el potencial de ser muy seria", dijo en una conferencia de prensa el alcalde neoyorquino, quien pidió a los ciudadanos que no se dejen "engañar por el sol de este viernes".

Bloomberg detalló que esta orden afecta a las zonas costeras en los barrios neoyorquinos de Brooklyn, Queens y Staten Island, incluyendo las áreas de Battery Park City, el sur de Manhattan -donde se encuentran Wall Street y el principal distrito financiero del mundo- y Governor''s Island.

Todos los residentes de las zonas localizadas por debajo del nivel del mar, designadas como el área A, tienen que haber dejado sus casas para las 17:00 de hoy hora local (21:00 GMT), aunque el alcalde instó a los neoyorquinos a que se muden "lo más pronto posible".

Ya que el estado de Nueva York ha decidido cerrar a partir del mediodía de hoy toda la red de transporte público de la ciudad, que incluye los sistemas de autobús, metro y ferrocarril, Bloomberg instó a los afectados a empezar a mudarse "ya mismo" porque hoy por la mañana esos medios de transporte "no podrán albergar a todos".

La Autoridad Metropolitana del Transporte (MTA, por sus siglas en inglés), confirmó que aumentará el servicio durante la mañana hoy.

"Solamente tienes que ver los mapas meteorológicos para entender lo grande que es esta tormenta y lo única que es", aseguró el alcalde neoyorquino, para quien "el mejor escenario posible es que la ciudad se vea golpeada por fortísimos vientos y, mucha, mucha, lluvia".

Además de las evacuaciones decretadas por el alcalde de la ciudad, las autoridades neoyorquinas comenzaron ayer a desalojar todos los hospitales, clínicas y asilos situados bajo el nivel del mar, un total de 22 localizados a lo largo de los barrios de la ciudad.

Las autoridades suspendieron además hasta el lunes todas las obras y se recomienda a los ciudadanos evitar parques y jardines por el riesgo de caídas de árboles y playas por el fuerte oleaje ante la llegada de Irene, el primer huracán en amenazar territorio estadounidense desde 2008, cuando Ike impactó en Texas.

Ante las alertas de las autoridades y las medidas sin precedentes tomadas ante la llegada de Irene, que se prevé arribe mañana con categoría 1, los neoyorquinos comenzaron a hacer acopio de provisiones, de forma que los supermercados de la ciudad comenzaban a verse desabastecidos de botellas de agua y latas de conservas.

Comida enlatada

"Compramos agua y comida enlatada. Mi madre ha hecho hielo en caso de que se vaya la luz para preservar los alimentos congelados", dijo Angel Cotto, quien acudió a un supermercado de Manhattan junto a su madre María.

"Estoy preocupado y nervioso porque viví en Puerto Rico el paso del huracán Hugo, aunque es mi primer huracán en Nueva York", aseguró Cotto, al tiempo que su madre manifestó estar "orando y pidiendo a Dios que no pase nada".

En el vecino estado de Nueva Jersey el gobernador, Chris Christie, que al igual que Nueva York declaró el jueves el estado de emergencia, ordenó la evacuación obligatoria de los residentes de Cape May County, la zona costera de Atlantic County y Long Beach Island, lo que afectará a cerca de un millón de visitantes en esa turística zona.

Además, los famosos casinos de Atlantic City serán cerrados a partir de mediodía del hoy, con lo que supondrá su tercer cierre en la historia desde que se legalizó el juego hace 33 años.