Francia se opuso hoy a la petición italiana de frenar los combates en Libia para abrir corredores humanitarios, al considerar que parar las operaciones podría permitir al líder libio, Muamar al Gadafi, ganar tiempo y organizarse.

"La coalición y los países reunidos en el grupo de contacto de Abu Dhabi hace dos semanas se mostraron unánimes en la estrategia: hace falta intensificar la presión sobre Gadafi", indicó el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.

Según un portavoz, "toda pausa en las operaciones correría el riesgo de permitirle ganar tiempo y organizarse", y "al final -añadió- es la población civil la que se vería afectada del mínimo signo de debilidad de nuestra parte".

El ministro italiano de Exteriores, Franco Frattini, subrayó hoy que esa interrupción de las hostilidades permitiría el acceso a localidades aisladas de Libia, en las que la situación humanitaria es "dramática, como sucede en las inmediaciones de Misrata o en la misma Trípoli".

Durante su comparecencia ante una comisión de la Cámara de los Diputados que analiza el Consejo Europeo que se inicia mañana en Bruselas, Frattini consideró que aunque la "prioridad" en la estrategia política sigue siendo alcanzar un alto el fuego, en estos momentos es "fundamental" que "cesen las acciones armadas" para ayudar a la población.