El líder tribal yemení Sadeq Abdalá al Ahmar aseguró ayer que acordó una tregua con las fuerzas de seguridad yemeníes, tras cuatro días de enfrentamientos en Saná, que dejaron 85 muertos.

"Desde anoche, hay un cese de hostilidades entre nosotros y las fuerzas del presidente yemení, Ali Abdalá Saleh, y también se lleva a cabo una mediación", declaró el jeque Sadeq al Ahmar, uno de los principales dirigentes de las fuerzas opositoras al régimen

El líder tribal hizo el anuncio en un discurso durante el funeral de 30 de sus milicianos, que murieron en los combates que se libraron en los últimos días en los alrededores de su vivienda, en el barrio de Al Hasba, en Saná.

"Si Saleh desea una revolución pacífica, pues que así sea, pero si quiere una guerra, pues nosotros lucharemos contra él", advirtió Al Ahmar ante miles de manifestantes que piden la renuncia del mandatario yemení.

Los combates entre los milicianos y las fuerzas de seguridad causaron desde el lunes la muerte de al menos 85 personas.