El líder libio, Muamar al Gadafi, y funcionarios de su entorno han llamado a otros dirigentes africanos para pedirles ayuda, pero sin demasiado éxito, según el diario británico "Financial Times".

Funcionarios africanos dijeron al periódico que Gadafi y sus acólitos habían telefoneado a sus aliados, adulándoles o amenazándoles, según los casos.

El régimen libio ha intentado también supuestamente reclutar a mercenarios africanos, de países como Níger, Malí, Somalia, Eritrea, Sudán y Chad, a los que el propio Gadafi ha apoyado en el pasado.

Pero, dice el periódico, hay tantos dirigentes africanos que parecen desear su derrota como los la temen porque, de producirse, dejarán de llegarles los petrodólares libios.

Gadafi ha canalizado miles de millones de dólares de inversiones en treinta y un estados africanos y ha dado su apoyo a numerosos políticos y dirigentes de ese continente.

El coronel Gadafi ha contribuido a aproximadamente un 15 % de los fondos que permiten que funcione la Unión Africana ya que no sólo ha pagado la parte que corresponde a Libia sino también la cuota de otros países más pobres.

Pero la compleja red de alianzas que ha tejido entre gobiernos y grupos paramilitares e insurgentes y su tendencia a combinar su generosidad con tácticas de matón le han hecho tantos enemigos como amigos, según el diario británico.

Así, el presidente ugandés, Yoweri Museveni, acusó la pasada semana a Gadafi de arrogancia y de inmiscuirse en los asuntos de otros estados.

Y otro gobernante africano que pidió el anonimato reveló al "Financial Times" que en la Unión Africana no se podía tomar ninguna decisión sin que Gadafi intentase intervenir.

Sin embargo, a diferencia de los países árabes, la Unión Africana se ha opuesto a la imposición de la zona de exclusión aérea en Libia e intentado, por el momento sin éxito, de impulsar una solución negociada al conflicto.

Ninguno de los tres estados africanos que están actualmente en el Consejo de Seguridad de la ONU -Suráfrica, Nigeria y Gabón- tiene deudas pendientes con Gadafi y todos ellos votaron a favor de la resolución de la ONU.

Varios presidentes africanos, entre ellos el ugandés Museveni y el surafricano Jacob Zuma, han declarado su oposición a los ataques aéreos occidentales contra las fuerzas libias.

Al mismo tiempo, sin embargo, ambos gobiernos han congelado los activos libios y, según fuentes diplomáticas, Sudán ha facilitado algunos vuelos militares occidentales.

El viernes, en Malí, miles de partidarios de Gadafi se manifestaron en Bamako profiriendo eslóganes antioccidentales.

La consultora británica Menas Associates, que lleva un cuarto de siglo dedicandose a Libia, calcula que pueden haber llegado al ese país hasta 5.000 mercenarios de países africanos.