El juzgado de menores en el Tribunal de Nuakchot comenzó hoy el proceso contra tres mujeres acusadas de explotar como esclavas a dos niñas "haratin" (descendientes de esclavos), en el primer juicio de este tipo que se celebra en Mauritania.

Una de las mujeres está acusada de explotar a las dos menores, de 14 y 10 años, que vivían con ella en un barrio de Nuakchot, mientras que las otras dos son las madres de las niñas, sobre quienes recaen los cargos de negligencia y participación en la situación de las esclavas.

En la primera sesión del juicio, las tres acusadas se han declarado no culpables de los cargos que se les imputan.

Este caso provocó los incidentes que acabaron con la condena a seis meses de prisión del presidente de la Iniciativa de Resurgimiento del Movimiento Abolicionista en Mauritania, Biram Uld Abeid Uld Dah, y de tres de sus colaboradores, la semana pasada.

Uld Dah fue detenido el pasado 13 de diciembre en Nuakchot durante un altercado con las fuerzas del orden delante de una comisaría donde la policía interrogaba a las dos niñas y a la mujer acusada de tenerlas como esclavas.

La policía subrayó que varios agentes intentaron detener el acceso a los activistas al interior del edificio, lo que provocó la confrontación.

Las dos niñas llegaron a comparecer ante la prensa acompañadas de sus padres para desmentir su explotación, y dijeron que sólo se trataba de una mujer de su pueblo que les daba alojamiento y las educaba como a sus hijos.

Hasta el momento, todos los procesos incoados en Mauritania al respecto de la esclavitud morían siempre en las instancias administrativas o gubernativas antes de conseguir llegar ante una corte.

En agosto de 2007, Mauritania adoptó una ley que penaliza las prácticas de esclavitud, pero las organizaciones abolicionistas consideran que el texto no ha tenido efecto porque las autoridades administrativas y judiciales rechazan aplicarlo en la práctica.