El presidente portugués, el conservador Aníbal Cavaco Silva, aseguró hoy que hará todo lo que esté a su alcance para evitar una ayuda financiera a Portugal, aunque avisó de que el país tiene que "estar siempre preparado para que pueda ocurrir alguna cosa".

En una entrevista al canal público RTP, Cavaco, que aspira a ser reelegido en los comicios del próximo 23 de enero, deseó que el Fondo de Estabilización Europeo "no sea una realidad" en su país y reiteró que hará lo posible para no crear "ninguna dificultad" al trabajo del Ejecutivo socialista con el que cohabita desde 2006.

El jefe de Estado, que calificó la situación financiera lusa de "seria", recordó que el Gobierno del primer ministro José Sócrates ya se mostró públicamente comprometido a evitar el rescate financiero europeo.

Cavaco alegó que no debe de especular sobre la posibilidad de que Portugal acuda a ayuda exterior, porque este extremo "dificultaría" el cometido del Ejecutivo.

"No quiero perjudicar a mi país", expresó el dirigente centro-derechista, quien recordó que "insultar a los mercados" no ayudará a mejorar la actual situación lusa.

Cavaco, economista de 71 años, mostró además su preocupación ante una posible intervención exterior barajada por analistas que carecen de "un conocimiento profundo de la situación social portuguesa".

Portugal vuelve a estar bajo la presión de los mercados desde la última semana y el interés de su deuda pública a diez años llegó a sobrepasar el 7 por ciento, que sitúa al país como uno de los candidatos a recibir ayuda internacional, según los especialistas.

El actual presidente luso, que fue primer ministro por el Partido Social Demócrata (PSD) entre 1985 y 1995, es el claro favorito en las elecciones del 23 de enero, de acuerdo con las encuestas, con cerca del 60 por ciento de intención de voto.

Su principal rival, el socialista Manuel Alegre, le sigue con el 30 por ciento de apoyo electoral, según estos mismos sondeos.