La activista saharaui Aminatu Haidar ha afirmado hoy en Leganés (Madrid) que la presidencia de turno española de la Unión Europea no ha supuesto un avance concreto en la lucha de su pueblo y ha expresado su decepción por el "silencio" que atribuye al Gobierno español respecto a su causa.

"Hasta el momento, desgraciadamente, no hemos concretado nada (durante la presidencia española) y lamentamos mucho este silencio por parte del Gobierno español", ha afirmado la defensora de los Derechos Humanos en declaraciones a la prensa tras recibir el premio Dolores Ibarruri que otorga Izquierda Unida (IU) de Leganés.

Haidar ha subrayado la "responsabilidad jurídica, moral e histórica con respecto a al pueblo saharaui y su drama", que le ha llevado a hacer "un llamamiento solemne y urgente al Gobierno español, como presidente de la Unión Europea, para salvar la situación de los Derechos Humanos" en el Sáhara.

La activista ha asegurado que, actualmente, hay en el territorio del Sáhara Occidental "hasta 50 presos de conciencia, la mayoría de ellos en huelga de hambre".

Además, ha acusado a las autoridades marroquíes de usar "estrategias como lo sucedido anteayer, con la implicación de colonos (marroquíes)" en la represión, lo que, a su juicio, puede derivar en "una masacre como la de Timor Oriental".

Sobre la posibilidad de que el Sáhara se convierta en un Estado independiente, ha señalado que es "un derecho legítimo, reconocido por Naciones Unidas" y ha mostrado sus esperanzas de lograrlo con el apoyo de "las personas de conciencia y los espíritus libres del mundo".

Preguntada por la huelga de hambre del activista cubano Guillermo Fariñas para lograr la liberación de los presos políticos de la isla, ha señalado: "Como defensora de los Derechos Humanos, defiendo los derechos fundamentales de todas las personas, cualesquiera que sean".

Aminatu Haidar permaneció en huelga de hambre durante 32 días en el aeropuerto de la isla de Lanzarote para reclamar que la dejaran regresar a El Aaiún, tras haber sido expulsada el pasado 14 de noviembre por las autoridades de Marruecos, que además le retuvieron el pasaporte.