La princesa Masako, esposa del heredero al trono de Japón, Naruhito, cumplió hoy 52 años y ha aprovechado la ocasión para asegurar que tras más de un década de depresión "continúa los esfuerzos" para recuperarse.

En un comunicado difundido por la Agencia de la Casa Imperial nipona, la denominada "princesa triste" ha dejado claro que ha intentado cumplir sus deberes públicos y privados "tanto como me ha sido posible".

Masako ha limitado sus apariciones públicas y compromisos oficiales desde que en 2003 la Casa Imperial revelara que sufría una depresión inducida por estrés, que algunos achacan a la rigidez del protocolo de la familia imperial y a las fuertes presiones que soportó para tener un hijo varón que perpetúe la línea sucesoria.

La princesa ha intensificado no obstante su agenda en los últimos meses, aunque sus médicos aseguran que sigue sufriendo "altibajos".

En julio asistió a la coronación del rey de Tonga junto a su esposo, el príncipe heredero, en lo que supuso su primer viaje oficial al extranjero en dos años y el segundo en más de una década, y participó en 52 eventos en el Palacio Imperial, frente a los 30 a los que venía acudiendo en los últimos años.

"Con la ayuda de la gente que me rodea, me gustaría seguir esforzándome para recuperarme", manifestó la princesa en el texto recogido por la agencia Kyodo.

Por su parte, el equipo médico responsable de su tratamiento señaló en un comunicado aparte que la princesa se ha esforzado para estar en buena forma física y aumentar sus compromisos oficiales.

"Aunque la princesa está teniendo una recuperación estable, su estado de salud todavía tiene altibajos", manifestó el equipo, quien pidió al público que no le exijan demasiado.

La princesa Masako no quiso dejar pasar la ocasión para expresar su deseo de que su única hija, la princesa Aiko, quien cumplió 14 años el pasado día 1, tenga una vida plena en su escuela, la prestigiosa Gakushuin de Tokio, donde estudia segundo curso de secundaria.

La joven princesa, quien sufrió algunos problemas de adaptación durante la primaria que logró superar, solía faltar con frecuencia a las clases en el pasado.

Una fuente cercana a la princesa indicó a la agencia Kyodo que la recuperación de Masako se debe a que la preocupación por la vida escolar de Aiko ha disminuido.