Mario Vaquerizo, músico y marido de Alaska, tiene muy claro cómo quiere vestirse y por qué. Reconoce que tiene "un estilo propio" y aunque no se considera una "fashion victim", sueña con ser un punk millonario y comprar cazadoras de diseño.

"Yo quiero ser punk millonario y quiero gastarme dinero en mis cazadoras", afirma resolutivo Vaquerizo en una entrevista. Además, añade que algunas de sus influencias a la hora de vestir son "el cantante Alice Cooper y el marido de Pamela Anderson, Tommy Lee".

El periodista añade que puede permitirse el lujo de poseer "una colección de 350 camisetas" o gastarse grandes cantidades de dinero "en cazadoras" porque las amortiza y cuida.En la primera temporada del "reality" que protagoniza con su mujer, se gastó 20.000 euros en dos cazadoras de Balmain, lo que suscitó muchas críticas.

Como sus ídolos, Vaquerizo se maquilla mucho los ojos con lápiz negro, y aclara que lo hace porque su estilo "viene del punk y del rock" pero no significa "que quiera parecer un mujer". Por esa razón, y aunque le gusta cuidar mucho su imagen, no se depila y reconoce que le "gusta el pelo en pecho", porque "los hombres que se hacen la ceja al hilo" le parecen "unas peponas".

"No soy una ''fashion victim'' y tengo mi propio estilo", afirma, defendiéndose ante las críticas por el precio de su ropa y reconoce, sin tapujos, que por ahora ya no necesita ir más de compras porque tiene "de todo".

Otra característica peculiar del cantante de "Nancys Rubias" es su delgadez. Vaquerizo confiesa estar cansado de que los periodistas siempre le pregunten por su peso: "Estar delgado no está reñido con llevar una dieta moderada". Y defiende que lo que le pasaba antes era que "no tenía una educación" con respecto a las comidas y gracias a su dietista, ha aprendido "a comer".

Con los años, además de cuidar su imagen, su estilo ha ido evolucionando. Tras ser hippie en su juventud, ahora su "estilo" es "ecléctico pero no gótico", como el de "los chicos del punk del 77".

Aunque se inclina hacia un "look" más neoyorquino, como el de las bandas norteamericanas Blondie y Los Ramones, y tiene claro que reniega del punk londinense porque, según él, "en Londres llevaban crestas y escupían y eso está bastante feo".

Este punk de aspiraciones millonarias nació en Lora del Río, en Sevilla, y se licenció en periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Saltó a la fama a gracias a su relación con la cantante de la movida madrileña, Olvido Gara, y desde entonces pocas veces pasa desapercibido gracias a su lisa y eterna melena negra, sus camisetas, los pantalones pitillo y las botas de vaquero.