La moda española mantiene un delicado diálogo con el arte en los salones del madrileño Museo Cerralbo, "en una exposición que invita a soñar y también a analizar la trayectoria de la costura española desde sus inicios con Balenciaga y Pertegaz", afirma el presidente de ACME, Modesto Lomba.

"La moda es sueño. 25 años de talento español" es el título genérico de una muestra en la que no existe específicamente un orden cronológico, "sino que es un montaje en el que las creaciones se adaptan y se fusionan a las distintas salas de este palacio de finales del siglo XIX", explican las comisarias Lucía Cordeiro e Isabel Vaquero.

En esta vivienda aristocrática, repleta de obras de arte, antigüedades y curiosidades reunidas gracias el afán coleccionista del Marqués Cerralbo, unos maniquíes exhiben lo mejor de la moda española, en total 117 piezas, de 73 diseñadores.

En el gran portal se expone un vestido beige con hermosa lazada de Jesús del Pozo, creación que abre la exposición, "un pequeño homenaje al diseñador que falleció el año pasado", comenta Cordeiro.

En el recibidor y la galería de verano se han instalado un hermoso vestido de flores de Hannibal Laguna y otro corto de color naranja de Adolfo Domínguez.

En los salones rojo y amarillo habitan los diseños de Agatha Ruiz de la Prada, Ana Locking y Rabaneda, mientras que en la salita rosa, una coqueta y femenina habitación decimonónica, se mira ante el espejo un vestido de Lydia Delgado.

El dormitorio del marqués de Cerralbo encierra prendas de estar en casa de la diseñadora Meye Maier, y su vestidor un maravilloso abrigo rojo de napa de Loewe.