Ritmos calientes y rico son con el más puro ADN cubano son los principales ingredientes del cóctel que ha elegido la terraza Isla de Mar de Santa Cruz de Tenerife para despedir el verano, en una gran fiesta que tendrá lugar el próximo sábado día 21 de septiembre a partir de las 21:30 horas.

El Septeto Santiaguero, que ofrecerá su único concierto en Canarias dentro de la intensa gira europea de este año, será el plato fuerte de la noche, en la que también actuarán el conjunto Clave de Son y varios djs locales.

Se trata de la primera vez que la banda, fundada en 1995 y dirigida por Fernando Dewar, recala en el Archipiélago.

Por ello, Alfredo Moré, promotor de la agencia Misondecuba, califica el show de "un auténtico lujo y una oportunidad única de poder disfrutar de una formación de este calibre, que está triunfando por todo el mundo".

De hecho, desde que a finales de junio iniciara su periplo europeo en Madrid, ha tocado en países como Francia, Italia, Holanda, Bélgica, Suiza, Finlandia, Estonia, Eslovaquia o Azerbaiyán, entre otros muchos.

No en vano, precisa que "el Septeto Santiaguero llegará a Tenerife el próximo sábado, después de una semana recorriendo varias ciudades de Alemania".

Al respecto, recalca que "para poder contar con su presencia en las Islas ha sido necesario un duro trabajo con muchos meses de antelación para poder cuadrar las fechas de este gran circuito europeo que culminará en octubre".

El representante de Misondecuba, que destaca el éxito que está cosechando en todos estas plazas tan lejanas, se muestra convencido de que hará lo propio en Tenerife, "ya que las conexiones con el tipo de música que hace esta banda su mucho mayores".

A su vez, apunta que el tema titulado "Esa familia a mi no me conviene", perteneciente a su último trabajo discográfico "Vamos pa'' la fiesta", está "funcionando" muy bien en el Archipiélago, "ya que, por su temática y su ritmo es muy pegadito a las costumbres canarias", precisa.

Del mismo modo, enfatiza que "hoy por hoy, el Septeto Santiaguero está considerado uno de los grupos más relevantes de Cuba y toda Latinoamérica y que, junto con Buenavista Social Club, son los exponentes de la música cubana más reconocidos en el continente europeo.

Como aval de su calidad, figura el premio cubadisco 2013, en la categoría de música popular/tradicional que han recibido recientemente, así como la nominación a la próxima edición de los Grammy latinos en la modalidad de mejor álbum de música tropical, una serie de reconocimientos, que se suman a una amplia lista de galardones que han ido cosechando desde su nacimiento.

Moré subraya que "uno de los puntos fuertes del Septeto Santiaguero es su arrollador directo que hace bailar a todo el que lo escuche".

En este contexto, ahonda que "son una formación joven, pero que transmiten mucha fuerza y cuentan con una imponente puesta en escena".

Así, argumenta que "es una de las cumbres del sonido tradicional de Santiago de Cuba, que está conformado por siete virtuosos músicos forjados en santuarios musicales como La Casa de la Trova o el Patio de los Dos Abuelos".

Igualmente, comenta que entre su "alineación" hay tres cantantes solistas, Rubén Matos, que también ejerce como guitarra y bajista, junto con Inocencio Heredia e Ismael Borges, lo que le permite una gran versatilidad y grandes recursos vocales.

A ellos se les suman Alberto Castellanos en la percusión, Dairon Robert al bajo y Edy Lobaina a la trompeta, asó como el citado Fernando Dewar, director y "alma mater" de esta formación.

Por tanto, los califica como un verdadero "dream team" del son cubano, que, a lo largo de su trayectoria musical, han sacado al mercado siete discos.

En el último de ellos, (Vamos pa'' la fiesta) en el que, a través de composiciones propias, revisan lo mejor de la música cubana de las últimas décadas, cuentan con colaboraciones estelares como las de Rubén Blades, Cheo Feliciano y José Alberto El Canario.

Son, guaracha, cumbia, bolero, changuí y danzón son solo algunos de los géneros musicales con los que estos virtuosos construyen un espectáculo concebido únicamente para que el público se lo pase estupendo.