Veinticuatro bandas de siete países conjugaron las diferentes variantes del rock en el festival "Quitofest", el mayor festival de música de la capital ecuatoriana, que congregó a decenas de miles de fanáticos.

Los organizadores del también llamado XI Festival de Música Independiente, estiman que unas setenta mil personas acudieron en los dos días de conciertos en el Parque Bicentenario, el antiguo aeropuerto de la ciudad.

"La gente ha disfrutado y ha venido al festival a tener un buen día para compartir con la gente a la que le gusta este género, incluso han venido muchos niños y sus padres, por lo que creemos que se está convirtiendo en un festival familiar", señaló Rodrigo Padilla, uno de los organizadores.

Las bandas que han llegado a los conciertos han demostrado "un gran nivel técnico, ha sido excelente" y, por la respuesta de la gente, el Quitofest "está en camino de convertirse en uno de los referentes de los festivales latinoamericanos", agregó.

El escenario, montado en un área frente a la que solía ser en el pasado un área de carga del antiguo aeropuerto de la ciudad, albergó a unos 35.000 fanáticos cada día, añadió Padilla que alabó a la multitud por la entrega que mostraron a los artistas.

Desfilaron por el escenario dieciséis bandas ecuatorianas y otras de Argentina, Colombia, Estados Unidos, Uruguay, Sudáfrica y la catalana "Kop", uno de los platos fuertes de la presente edición.

También causaron furor los "No te va a gustar", de Uruguay; "Dread Mar I", de Argentina; los colombianos "Nix", la banda californiana "Hirax", la sudafricana "Boargazm" y las ecuatorianas "Rima Roja en Venus", "Demolición", Descomunal", "Aztra" y "Jodamassa", entre otras.

La marea de jóvenes que llenó el espacio frente al escenario, compartió con las bandas la euforia de un sonido envolvente, que invitaba a sacudir las cabelleras y gritar.

Círculos de jóvenes, al estilo "mosh", dibujaban coreografías en medio de la muchedumbre al son de la fuerte percusión de las bandas de "metal", "trash" y "heavy" que se presentaron, junto a otras de "reggae", "ska" y otro tipo de "música independiente".

Los trajes negros y los peinados "punk" también lucieron en el festival, que ya entrada la noche se coloreó de psicodelia con el juego de luces que se emitía desde el escenario.