El nuevo presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, ganó 4,2 millones de euros en 2018, su último año como consejero delegado de la entidad, y su plan de pensiones engordó hasta los 18,6 millones de euros.

No obstante, la remuneración total generada asciende a 4,5 millones de euros, un 8 % menos que un año antes, ya que aunque el salario fijo se mantuvo en 1,965 millones, el variable bajó un 15 %, hasta 2,4 millones, según la información remitida a la CNMV.

Por su parte, el actual consejero delegado, Onur Genç, ganó 3,18 millones de euros, pues percibió un salario fijo de 2,2 millones y un variable de casi un millón más como responsable de la filial en Estados Unidos, BBVA Compass.

El consejo de administración de BBVA, compuesto por 15 miembros, obtuvo un salario conjunto de 15,66 millones de euros en 2018, inferior a los 16,5 millones obtenidos un año antes.

En cuanto a pensiones el banco tiene reconocidos casi 100 millones de euros, pues el importe acumulado por antiguos consejeros de BBVA supera los 79 millones de euros, a los que hay que sumar cerca de 20 millones de los actuales ejecutivos: Carlos Torres Vila y José Manuel González-Páramo.

El banco destinó además 25,3 millones a retribuir a la alta dirección.