El pago digital, que promueve la identidad "online" del consumidor, aumenta los riesgos y la exposición del sector financiero a sufrir ciberataques al dificultar la protección de los datos del cliente, según un informe de la consultora Capgemini.

El estudio, que estudia las tendencias de pagos para 2019, también refleja cómo la identidad digital refuerza la seguridad en la industria del pago al obligar al cliente a identificarse y a autorizar sus operaciones.

Según datos de la consultora, sólo el 38 % de los ejecutivos de bancos de varios países planifica en la actualidad cómo su entidad debe jugar un papel central en los sistemas de pago, en un momento en el que las transacciones electrónicas son cada vez más frecuentes.

En concreto, estos pagos aumentaron un 12,3 % en 2016 en España, que se situó como el octavo país en el que más crecieron; sin embargo, entre 2012 y 2015 tuvieron un crecimiento "nulo".

Además, el sector bancario se enfrenta a "múltiples obstáculos", tales como el de desarrollar un ecosistema de pagos digitales "fluido, equilibrado y sólido".

Para ello, los bancos deben "reposicionarse" ante las nuevas tecnologías, a pesar de que estén "cargados" de sistemas tradicionales heredados del pasado.

Por otra parte, el informe indica que una de las tendencias que influirán en los pagos el próximo año será el internet de la cosas, que se define como la implantación de aplicaciones tecnológicas basadas en la red.

Este método, que facilita el intercambio de datos y promueve otra manera de relacionarse entre la entidad y el cliente, también es más vulnerable ante los ciberataques.

Otro de los pagos esperados para 2019 son las interfaces públicas de programación de aplicaciones, API en inglés, un sistema que simplifica el proceso de las transacciones y permite que se compartan los datos financieros de los clientes con protocolos comunes.

Desde Capgemini consideran que las API abiertas tienen un potencial "prometedor" para redefinir los modelos de la industria de pagos al actuar como un "pegamento" dentro del nuevo ecosistema, ya que serán las propias partes interesadas las que definirán las estrategias digitales.

En este sentido, la consultora recuerda que BBVA ya lanzó API_Market, una estrategia que proporciona a empresas y desarrolladores acceso a API de diferentes entidades del banco, así como un entorno de prueba en el que analizar las innovaciones que proporciona este sistema.

Además, el informe señala que en 2019 las grandes multinacionales tecnológicas o "bigtech", como Google o Apple, se mantendrán como una de las principales amenazas para el sector bancario al contar con unas carteras electrónicas al alza y unos servicios más innovadores.

Sobre este punto, Capgemini indica que las carteras electrónicas son una "importante" oportunidad de mercado para los proveedores de medios de pago no tradicionales, ya que en 2016 supusieron el 8,6 % de las transacciones digitales mundiales, un dato del que las "bigtech" fueron responsables del 71 % total de las transferencias.