El déficit del Estado en los nueve primeros meses del año se situó en 13.245 millones de euros, una cifra que supone una reducción del 22,6 % con respecto al mismo periodo de 2017 y que equivale al 1,09 % del PIB.

De acuerdo a los últimos datos de ejecución presupuestaria publicados hoy por el Ministerio de Hacienda, esta corrección del déficit se logra después de que los ingresos -145.233 millones, un 8,3 % más- registraran un avance más intenso que el de los gastos -158.478 millones, un 4,9 % más-.

En términos primarios -es decir, sin tener en cuenta los intereses de la deuda-, el Estado cerró septiembre con un superávit de 6.347 millones de euros, una cifra que más que duplica la de 2017 y que equivale al 0,52 % del PIB.

Hacienda también ha publicado los datos de ejecución presupuestaria del conjunto de las administraciones públicas correspondiente a los ocho primeros meses del año -salvo las corporaciones locales, cuyos datos aún no se conocen-, que se saldó con un déficit de 23.674 millones de euros, un 1,95 % del PIB.

En ese periodo, la administración central registró un déficit equivalente al 1,66 % del PIB y los fondos de la Seguridad Social, del 0,43 %, mientras que las comunidades autónomas se anotaron un superávit del 0,14 % del PIB, si bien estos datos están "afectados" por el impacto de la liquidación definitiva del ejercicio 2016, favorable a las autonomías y que fue abonada en julio.

Los datos actualizados hasta septiembre, que se refieren exclusivamente a la ejecución presupuestaria del Estado, señalan que los ingresos estatales aumentaron en un 8,3 % en los nueve primeros meses del año, impulsados por la recaudación.

El IVA ingresó 57.938 millones, un 7,1 % más; el IRPF, 29.354 millones, un 11,1 % más, impulsado por el buen comportamiento de la campaña de la renta, y el impuesto de sociedades, 15.733 millones, un 7,6 % más.

También repuntaron las rentas de la propiedad, en un 31,9 %, impulsadas por los mayores dividendos del Banco de España, Loterías y Apuestas del Estado y Enaire.

Asimismo, crecieron, en un 26,8 %, los ingresos por transferencias entre Administraciones Públicas, tanto por el sistema de financiación de las comunidades autónomas como por el cupo vasco.

En cuanto a los gastos, entre enero y septiembre aumentaron en un 4,9 %, principalmente debido al repunte observado en las transferencias corrientes entre administraciones públicas.

En ese periodo aumentaron las transferencias a comunidades autónomas, en parte debido a las mayores entregas a cuenta del IVA, y las dirigidas a los Fondos de la Seguridad Social, en parte por los recursos transferidos para apoyar el equilibrio del sistema.

Las inversiones sumaron 4.833 millones, un 60,5 % más, mientras que los consumos intermedios avanzaron un 2,6 %; la aportación a la Unión Europea por recursos de IVA y RNB, un 17,8 %, y la remuneración de los asalariados, en un 2,5 %.

En cambio, el gasto en intereses descendió en un 0,1 %, hasta los 19.592 millones.