Air Berlin informó hoy de que ha acordado la venta a Lufthansa de su filial de vuelos regionales LGW, la aerolínea austríaca de vuelos vacacionales NIKI y otros 20 aviones, sin facilitar el precio de la transacción.

El consejo de supervisión de Air Berlin aprobó ayer la venta de partes de la compañía, lo que garantiza que se van a mantener todos los empleos en NIKI y LGW y que se abren perspectivas para miles de empleados de Air Berlin.

La operación todavía debe ser aprobada por los acreedores de Air Berlin, el interventor del procedimiento de insolvencia y por las autoridades europeas de defensa de la competencia en Bruselas.

Air Berlin, que desde el 25 de septiembre negociaba en exclusiva con Lufthansa e EasyJet, opera en estos momentos con un crédito estatal de 150 millones de euros, que ahora prevé poder devolver.

También dijo que todavía negocia con la compañía británica de vuelos de bajo coste, que ha presentado una oferta por parte de la flota de Air Berlin.

En caso de que se llegue a un acuerdo con EasyJet, también se abren perspectivas de nuevos empleos para los empleados de Air Berlin.

El consejero delegado de Air Berlin, Thomas Winkelmann, dijo: " Hemos dado un gran paso" y que una gran parte de los trabajadores tendrá oportunidades de trabajo pero que para ello es necesario que la Comisión Europea (CE) apruebe la transacción.

Los empleados de Air Berlin deberán solicitar ser contratados por Eurowings, filial de Lufthansa, y se les reconocerá los años trabajados en Air Berlin, aunque todavía no se sabe qué ocurrirá con el pago de las pensiones que corresponde a la empresa, dijo a EFE un portavoz de Lufthansa.

El presidente del grupo Lufthansa, Carsten Spohr, había informado anteriormente de que la primera compañía aérea de Alemania se iba a hacer con la mayor parte de Air Berlin con la adquisición de 81 aviones y 3.000 empleados por unos 1.500 millones de euros.

Algunos medios alemanes informan de que Lufthansa va a pagar 210 millones de euros.