La prima de riesgo española perdió un punto básico al inicio de la última sesión de la semana y del mes, y se situó en 114 puntos, después de que el interés del bono alemán a diez años que funciona como referencia para calcular este indicador subiera al 0,484 % desde el 0,479 % previo.

Según los datos del mercado recogidos por Efe, el rendimiento del bono español del mismo plazo, cuyo diferencial con el germano marca el riesgo país, se situó en el 1,628 %, muy cerca del 1,626 % de la víspera.

Los inversores estarán pendientes hoy del cierre semanal de la Bolsa española, que esta vez coincide con el mensual y que será, previsiblemente, similar al del comienzo de un mes en el que la negociación se ha visto marcada por el próximo endurecimiento de la política monetaria estadounidense y europea, la evolución del euro y el petróleo y la tensión entre Corea del Norte y EEUU.

Asimismo, el Banco de España publica el detalle de la deuda del conjunto de las administraciones públicas del segundo trimestre, después de que en los tres primeros meses del año alcanzara el 100,4 % del PIB.

Y el Instituto Nacional de Estadística (INE) publica la cifra de turistas extranjeros que viajaron a España en los ocho primeros meses del año, después de que en julio se superaran los 10 millones de visitantes.

En cuanto a los países de la zona del euro que se consideran periféricos, la prima de riesgo de Italia se anotaba tres puntos básicos al comienzo de la sesión y quedaba en 166, poco antes de que el Instituto Nacional de Estadística del país publique la inflación correspondiente a septiembre.

El riesgo país de Portugal, por su parte, subía a 195 puntos, uno más que ayer, poco antes de que se conozca la previsión mensual de desempleo.

Por último, la prima de riesgo de Grecia aumentaba tres puntos y alcanzaba los 526 enteros.

Los seguros de impago de la deuda española ("credit default swaps"), cantidad que hay que pagar para garantizar una inversión de 10 millones de dólares, subían a 108.360 dólares, por debajo de los 203.390 dólares que cuestan los italianos.