El Salón Internacional del Automóvil de Nueva York inició una nueva edición centrada en los vehículos de lujo y grandes todocaminos SUV, como el Lincoln Navigator, y los automóviles de gran potencia, como el Dodge Challenger SRT Demon.

Los todocaminos SUV son el vehículo de moda en Estados Unidos, tanto para las marcas de producción masiva como para las de lujo. Y esa tendencia se vio clara en los estrenos de la muestra neoyorquina, empezando por el nuevo Navigator de Lincoln.

El Navigator 2018, que aparecerá en los concesionarios de Norteamérica a finales de año, está diseñado para convertirse en el buque insignia de la nueva Lincoln, la marca de lujo del Grupo Ford, que ha pasado por años difíciles.

Pero hoy, el presidente de Ford, Mark Fields, aseguró no sólo que Lincoln tiene un futuro, sino que la marca está mostrando algo más que signos de recuperación.

"Lo vemos en el aumento de nuestras ventas. Por ejemplo el año pasado, las ventas de Lincoln en Estados Unidos subieron un 10 % cuando las del segmento de la gama alta de hecho cayeron un 1 %", explicó Fields.

"Y en China, casi triplicamos nuestras ventas hasta convertirnos en la marca de lujo de más rápido crecimiento en ese mercado. Y globalmente, las ventas de Lincoln han duplicado el ritmo del sector automotriz con un crecimiento del 71 % en los últimos 4 años", añadió.

Otros dos fabricantes aprovecharon Nueva York para presentar todocaminos SUV de grandes dimensiones, aunque fueran sólo prototipos.

Infiniti, la marca de lujo del grupo Nissan, reveló el QX80 Monograph sobre la plataforma del Nissan Armada y que anticipa el aspecto que la tercera generación del QX80 de producción tendrá cuando llegue a los concesionarios a finales de este año.

El otro prototipo es el Ascent de Subaru, la marca japonesa conocida por sus vehículos de tracción a las cuatro ruedas.

El Ascent mostrado hoy es un SUV de grandes dimensiones, con tres flas de asientos y que también anticipa el vehículo de producción que Subaru tiene previsto para el 2018, con un nuevo motor turboalimentado boxer.

Y Buick, la marca de la gama alta de General Motors (GM), reveló el Enclave Avenir, un SUV grande con el que el fabricante abre un nuevo capítulo en su historia.

A partir de ahora, Avenir será una submarca, anunció Duncan Aldred, vicepresidente global de Buick, que designará los vehículos más exclusivos del fabricante.

"Esta es una nueva submarca de lujo que anunciamos el pasado otoño y el Enclave es el primero de una gama de modelos que van a aparecer con la etiqueta. El nombre proviene del aclamado prototipo de 2015 Avenir que ha inspirado el diseño de nuestros últimos modelos de producción, incluido este Enclave", dijo Aldred.

Pero las novedades de Nueva York no se han reducido al segmento de todocaminos SUV.

Quizás la estrella de la muestra ha sido el endemoniado Dodge Challenger SRT Demon, con sus 840 caballos de potencia que le convierten en el "muscle car" más potente de la historia.

Con este vehículo, Dodge resucitó la etiqueta Demon y, como declaró Tim Kuniskis, director de Dodge, SRT, Chrysler y FIAT, se trata de "es una declaración de principios".

El Demon utiliza un motor sobrealimentado de 6,2 litros HEMI Demon V8 que produce 840 caballos de potencia y 770 libras-pie de par motor y acelera de 0 a 60 millas por hora (0 a 96''5 kilómetros por hora) en 2,3 segundos.

Esta potencia y velocidad se traduce en que el Demon consigue la mayor fuerza g de aceleración alcanzada por un vehículo de producción: 1,8 g.

También en el segmento de lujo, Acura presentó el sedán TLX 2018 mientras que Lexus reveló el LS 500 F Sport 2018.

Entre los fabricantes alemanes, Audi trajo el R8 LMS GT4 pero lo que es más importante, lanzó en Nueva York su marca Sport que en los próximos 24 meses presentará en Estados Unidos ocho modelos con la etiqueta.

Y Mercedes desveló por primera vez en Estados Unidos el AMG GLC 63 S 4Matic, con un motor biturbo capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en 3,8 segundos.

Los fabricantes que rompieron la norma de estrenos con vehículos más "de calle" fueron los surcoreanos Hyundai y Kia.

Hyundai reservó para Nueva York la nueva generación de la berlina Sonata, una versión más refinada y elegante del clásico vehículo.

Y Kia lanzó en Manhattan el subcompacto Rio 2018, un vehículo con el que la marca quiere seguir atrayendo jóvenes que están buscando su primer vehículo.