El Alto Comisionado de la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros, ha asegurado hoy que la única amenaza sobre los flujos turísticos que recibe nuestro país es el ''Brexit'', teniendo en cuenta Reino Unido es el primer emisor, un efecto que solo podemos intuir y que dependerá del desarrollo de las negociaciones con la Unión Europea durante los dos próximos años, al tiempo que ha abogado por captar visitantes de alto poder adquisitivo.

Durante su primera comparecencia ante la Comisión de Energía, Turismo y Agenda Digital en el Congreso, recordó que existen además 300.000 residentes británicos con propiedades en España que viajan con regularidad.

"No podemos anticiparnos a su efecto pero sí sabemos cuando se ha incrementado la fiscalidad sobre los bienes la demanda ha caído, con lo que alguna medida de este tipo nos afectaría seriamente", ha indicado.

El Alto Comisionado, que negó las tesis que atribuyen a la situación de otros países el ''boom'' turístico que vive España, apuntó que el desvío desde otros destinos competidores apenas se traduce en 300.000 personas que han dejado de viajar a otros países del Mediterráneo, una cifra pequeña frente a 75 millones anuales.

No obstante, reconoció que se está empezando a percibir dificultades en la prestación de servicios desde el agua hasta la prestación sanitaria en algunas zonas por el alto nivel de población, principalmente en las costas. "Vamos a ver un conflicto creciente en zonas de cogestión", apuntó.

SUSTITUIR EL TURISMO ''BARATO''

A su juicio la solución pasa por sustituir "turismo barato y masivo por turismo de calidad", algo que, según dijo, "no se hace de la noche a la mañana y que llevará su tiempo". "Hay que cambiar las tuberías sin dejar de suministrar agua", señaló evocando las palabras de Adolfo Suárez, para añadir que se trata de cambiar el turismo de 49 libres de tres noches por los 1.000 euros per cápita.

Preguntado por la incidencia en la marca España del empleo en el sector, el Alto Comisionado señaló que el índice de satisfacción no refleja que el nivel de calidad se haya deteriorado por la alta temporalidad.

DIVERSIFICACIÓN

Marca España ha constatado que el gran atractivo turístico del país se concentra en el ''sol y playa'' y en los meses de julio y agosto, por lo que donde hay que trabajar es la diversificación y apostar por abrir mercado en segmentos como el turismo de compras, el turismo deportivo, el cultural, la gastronomía y el turismo de salud.

"Nuestro punto de apoyo son las embajadas y el dispositivo de Exteriores", explicó tras recordar que su departamento no tiene presupuesto propio y depende de Presidencia, por lo que no tiene capacidad para decirle a la Secretaría de Estado de Turismo cómo actuar pero su trabajo es ganarse la complicidad de todos. "Mi colega británico está en el 10 de Downing Street en el tercer piso, una planta por encima de Tneresa May", apuntó.

Para ello, trabaja en coordinación con Turespaña para priorizar aquellos mercados de interés, más allá de los que concentran al 80% de los turistas que viajan a España en verano, en función de 150 indicadores y realizar acciones conjuntas de promoción en el exterior en los considerados estratégicos aprovechando sinergias.

De esta forma, en el plan anual de Marca España se contemplan 25 países donde desarrollar acciones prioritarias, aquellos que representan más del 80% de la exportación, más del 90% de la inversión extranjera y española en el exterior y más del 80% de los turistas que nos visitan.

Así, hizo un repaso de las acciones conjuntas desarrolladas en Rusia o en Dubái para promover el turismo de compras, la elaboración de una guía nacional gastronómica (Gastro España) o la elaboración de unos sellos en colaboración con Correos sobre España para poner en valor sus atractivos (E -empresa-; S -sol-; P -patrimonio-; A -arte-; Ñ -de español- y A -avance y tecnología-).

El Alto Comisionado destacó que en los últimos años se ha percibido una recuperación modesta de la autoestima de los españoles y de la percepción sobre nosotros mismos, vinculada por ejemplo a los productos de exportación, cuya aceptación supera el 50% en todas las comunidades autónomas.

También destacó que el grado de aceptación de nuestra imagen en el exterior ha crecido progresivamente desde el año 2012, situándose siempre por encima de la percibida dentro del país.

LIMITACIONES AL EXTERIOR.

Entre las principales dificultades para la promoción en el exterior, Espinosa de los Monteros se refirió a la falta de vuelos directos a mercados estratégicos como Asia; la lentitud de los procesos en la emisión de visados con algunas deficiencias que están prácticamente solucionadas y la falta de relaciones comerciales o presencia empresarial en algunos mercados.

Finalmente, afirmó que las marcas regionales como tales "no existen", salvo California, en un nivel de percepción reconocible pero sí las de país y las de las ciudades por lo que llamó a trabajar de la mano. Así recordó que cuando fue nombrado contactó con todas las CC.AA. y de algunas no recibió respuesta.

"Algunas tienen claro que no quieren hacer con Marca España. Yo les pedí en ese caso neutralidad y no la he encontrado, más bien hostilidad", dijo tras referirse a las recientes declaraciones del presidente de la Generalitat de Cataluña que puso a España al nivel de Turquía. "A mí me parece que ninguna persona que cobra un sueldo público del contribuyente de un país debería hacer nunca este tipo de declaraciones", concluyó.