El grupo químico y farmacéutico alemán Bayer, que prevé cerrar la adquisición del productor de transgénicos estadounidense Monsanto a finales de año, tuvo en 2016 un beneficio neto de 4.531 millones de euros, un 10,2 % más que en 2015.

Bayer informó hoy en su sede central en la ciudad alemana de Leverkusen (oeste) de que la facturación mejoró en el mismo periodo un 1,5 %, hasta 46.769 millones de euros.

El beneficio operativo subió también un 12,8 %, hasta 7.042 millones de euros, por la venta de medicamentos y el buen resultado de Covestro (antes MaterialScience), la división de plásticos para la industria, que es ahora independiente.

Sin embargo, la división de fitosanitarios (Crop Science) redujo la facturación un 2,1 % (9.915 millones de euros) y el beneficio operativo un 16,2 % (1.755 millones de euros).

El presidente de la junta directiva de Bayer, Werner Baumann, dijo al presentar el resultado que solicitará la aprobación de la compra de Monsanto a la Comisión Europea (CE) en el segundo trimestre.

El proceso se ha retrasado algunas semanas ya que la CE ha pedido más documentación.

Baumann y el consejero delegado de Monsanto, Hugh Grant, se reunieron recientemente con el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, reunión que el ejecutivo alemán calificó de "constructiva".

En esa reunión Bayer explicó a Trump que la fusión con Monsanto, por la que ofreció 128 dólares por acción, es un caso de crecimiento y que contribuirá a crear empleos innovadores de alta calidad en EEUU, la gran preocupación del nuevo presidente estadounidense.

Trump se interesó por el sector de la agricultura, las características del mercado y por cómo ambas compañías pueden contribuir a la innovación, explicó a medios españoles el director de Finanzas, Johannes Dietsch, tras la rueda de prensa.

Para Bayer, que está presente en EEUU desde hace 150 años, este mercado es mayor que Alemania.

Asimismo Bayer tiene más empleados que Monsanto en EEUU, donde cuenta con 21 centros: los más importantes son el de farmacéutica en Nueva Jersey, el de fitosanitarios en Carolina del Norte y la sede central en ese país en Pensilvania.

En el sector de agroquímica, Chemchina también va a adquirir la suiza Syngenta y Dupont y Dow Chemical llevarán a cabo una fusión entre iguales, que combinará semillas y productos de protección de las plantas.

El inversor estadounidense Warren Buffett ha apostado por la transacción y compró recientemente ocho millones de acciones o un 1,8 % de Monsanto, cuyos títulos cuestan ahora unos 110 dólares.

Bayer ya ha pedido dos tercios de las solicitudes de aprobación a las 30 autoridades regulatorias que deben dar el visto bueno.

El presidente de Bayer se mostró confiado de poder cerrar la transacción antes de finales de 2017.

Hay rumores de que Bayer, que necesita dinero para financiar la compra por valor de 66.000 millones de dólares (unos 58.000 millones de euros), quiere desprenderse de su participación del 64 % en Covestro.

Dietsch reiteró que Bayer quiere desprenderse a medio plazo completamente de esta participación, pero no pudo decir nada sobre las medidas y el momento en que lo hará.

Covestro tuvo en 2016 un beneficio neto de 795 millones de euros, un 131,8 % más que el ejercicio anterior.

El fabricante de la aspirina tuvo unos gastos extraordinarios de 1.088 millones de euros (819 millones de euros en 2015) de depreciaciones de activos intangibles, costes de los programas de mejora de la eficiencia y los costes de adquisición de negocios adquiridos.

La división farmacéutica subió el beneficio operativo un 11,9 % (3.389 millones de euros) y las ventas, un 7,3 % (16.420 millones de euros).

Las ventas de cinco de sus principales medicamentos con receta (Xarelto, Eylea, Xofigo, Stivarga y Adempas) llegaron a 5.413 millones de euros, en comparación con los 4.231 millones en 2015, un 27,9 % más.

Cinco bancos (Merrill Lynch, Credit Suisse, Goldman Sachs, HSBC y JP Morgan) van a proporcionar 57.000 millones de dólares (unos 54.285 millones de euros al tipo de cambio actual) para financiar la compra de Monsanto.

Bayer ha mitigado en un 50 % el riesgo del tipo de cambio en esta transacción.

El año pasado se cubrieron riesgos por la subida del dólar por 17.000 millones de euros, según Dietsch.

En noviembre de 2016, Bayer colocó deuda obligatoria convertible en acciones por valor de 4.000 millones de euros.

Dietsch dijo que prevé emitir más deuda corporativa en euros para financiar la transacción y cuenta con que el Banco Central Europeo (BCE) compre buena parte de ella.