El secretario general de la Asociación Española de Banca (AEB), Pedro Pablo Villasante, advirtió ayer de que la presión sobre la prima de riesgo no se suavizará hasta que haya acuerdos "profundos y de calado" que den estabilidad a la moneda única y, en consecuencia, a la eurozona.

Durante la rueda de prensa en la que presentó los últimos resultados del subsector bancario, Villasante explicó que dicha presión refleja no solo las dudas de cada país, sino también "la capacidad de la Unión Europea de resolver los problemas de gobernanza y avanzar en una integración económica".

El representante de la AEB aludió directamente a Grecia, a cuyo Gobierno pidió un compromiso para que el próximo paquete de ayuda que reciba de sus socios comunitarios sea "el definitivo". De lo contrario, su comportamiento "puede copiarse, y cualquier Estado que tenga el mismo problema querrá que acreedores y vecinos ayuden", mientras el país en cuestión no hace el esfuerzo.

En el ámbito nacional, pidió al Ejecutivo que persevere en las medidas ya aprobadas para corregir el déficit público y que las acompañe de reformas estructurales "efectivas", al tiempo que demandó que la revisión del sistema financiero se haga con "profundidad, transparencia y, si es posible, con dinero privado".

En este sentido, Villasante deseó éxito a las cajas convertidas en bancos que van a salir a Bolsa próximamente, ya que, explicó, un buen debut en los mercados sería bueno para España, puesto que aportaría confianza en nuestra banca y en nuestra economía.

"Estas medidas -señaló-, además de rebajar de forma definitiva la prima de riesgo española, deben permitir ganar competitividad para aprovechar al máximo, y cuanto antes, la recuperación de la economía mundial".

En Luxemburgo, antes de la reunión de los ministros europeos de Finanzas (Ecofin), la titular española del área, Elena Salgado, aseguró que no está preocupada por el efecto de contagio que pueda tener sobre la deuda del país la falta de acuerdo para el desembolso del próximo tramo de ayuda a Grecia, y aseguró que los mercados "distinguen perfectamente" entre ambos países.

Por contra, el presidente del Círculo de Empresarios, Claudio Boada, afirmó que España está "al límite" y "cada vez es más rehén" de la situación de Grecia, por lo que abogó por dar paso a otro Gobierno para superar la desconfianza de los mercados.

Asimismo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo que se necesita más "cohesión y cooperación" en Europa para hacer frente a la crisis y alertó de que los problemas en los países periféricos amenazan la recuperación en el núcleo de la eurozona.