EL 2011, Año Internacional de los Bosques, proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2006. Esta conmemoración se enmarca en un contexto más amplio, el del Decenio de las Naciones Unidas para Los Desiertos y la Lucha contra la Desertificación, que abarca de 2010 a 2020. Ambas conmemoraciones persiguen que la humanidad de todo el planeta tome conciencia de que los bosques son una parte esencial de la vida, con importantes beneficios para la economía, la sociedad y el medio ambiente; en definitiva, se pretende que, en este año, se promuevan acciones a favor de la sostenibilidad, la conservación y el desarrollo de los bosques y la masa arbórea de la Tierra.

Entre las actividades conmemorativas del Año Internacional de los Bosques figura también el intercambio de conocimientos sobre estrategias prácticas que favorezcan la ordenación forestal sostenible y el retroceso de la deforestación y la degradación de los bosques. Con objeto de facilitar la organización de estas actividades, se alienta a los gobiernos a que establezcan comités nacionales y centros de coordinación en sus países respectivos, y a que aúnen sus esfuerzos a los de las organizaciones regionales e internacionales y los estamentos civiles. La Secretaría del Foro de las Naciones Unidas sobre los Bosques (FNUB) será el centro de coordinación designado para la puesta en práctica del Año Internacional de los Bosques.

Según consta en la página oficial de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), es la segunda vez que se asigna a los bosques su propio año internacional. La primera fue en 1985, cuando el Consejo de la FAO pidió a todos los estados miembros que concedieran un reconocimiento especial a los bosques en el curso del año a fin de centrar la atención mundial en la necesidad de conservar y proteger los bosques; despertar la conciencia política y pública en lo relativo a los recursos forestales; identificar y poner de relieve los factores que amenazan a estos recursos forestales; y movilizar a la población, y en especial a los jóvenes, para que participasen en actividades orientadas hacia la protección de los bosques.

Tala ilegal

Según datos oficiales, Europa es el segundo importador del mundo de artículos de madera procedentes de la tala ilegal de los bosques tropicales. Estos productos suponen entre el 20 y el 40% del comercio internacional de artículos de madera.

Precisamente para tratar de atajar este comercio ilegal y asestar un duro golpe a la deforestación tropical, la Unión Europea ha aprobado un reglamento, que entrará en vigor a finales de 2012, que prohíbe el comercio de madera obtenida ilegalmente, lo que, sin duda, tendrá efectos muy positivos para la conservación de los bosques tropicales.

Este tipo de normas se antojan cada vez más necesarias en cualquier rincón del mundo, puesto que la deforestación supone casi el 20% de las emisiones de gases de efecto invernadero, además de incrementar los corrimientos de tierra y la pérdida de biodiversidad, creciendo a un ritmo de cerca de 13 millones de hectáreas al año.

La Amazonia, Congo e Indonesia son los tres principales focos de la tala ilegal de madera.

Iniciativas canarias

Atendiendo a su limitado territorio y a su rica biodiversidad, Canarias no puede permanecer ajena a la necesidad de conservar y recuperar zonas rurales empobrecidas por el efecto de diversos factores a lo largo de los años.

Varias organizaciones, públicas y privadas, trabajan para lograrlo y vienen realizando acciones para mejorar nuestro paisaje, reforestar y conservar nuestro entorno medioambiental. Destacamos hoy aquí la de la Cámara de Comercio de Tenerife, que lanzó el pasado año su iniciativa "Ecobonos", junto con la colaboración del Cabildo de Tenerife y entidades privadas como CajaCanarias y empresas con Endesa, que se han sumado a este proyecto que persigue repoblar la corona forestal del Sur de Tenerife.

La campaña de ''Ecobonos'' permitirá repoblar una superficie de 45 hectáreas, el equivalente a más de 50 campos de fútbol, en los altos de Arico y Fasnia, recuperando con ello, según palabras del consejero insular de Medio Ambiente del Cabildo "una zona históricamente esquilmada por las labores de pastoreo en los montes y por el aprovechamiento de la madera".

También es reseñable la labor que realiza la Fundación Foresta, constituida en Canarias en 1998, ante la preocupación de un grupo de profesionales y amantes de la naturaleza frente al abandono de los terrenos de los propietarios privados y la situación actual del ecosistema vegetal canario. Esta Fundación cuenta con el apoyo de la iniciativa privada.

El principio fundacional de Foresta es el aumento y la mejora de la superficies forestales insulares, sujetando la tierra frente al deterioro erosivo por la deforestación histórica, apoyando la creación nueva vida y el mantenimiento de la biodiversidad.

El pasado año, la Fundación presentó una Guía Didáctica de la Reforestación en Canarias, en formato Web www.plantamosfuturo.es, elaborada con el patrocinio de Endesa y CajaCanarias. Esta guía es una herramienta accesible a cualquier persona -profesores, alumnos y ciudadanos- que quieran conocer de cerca la realidad forestal de Canarias.

La Guía Didáctica de la Reforestación pretende, no sólo animar y concienciar a los jóvenes sobre la contribución al cuidado y la mejora de los ecosistemas de las islas, sino, también, formarlos en el conocimiento del por qué, los beneficios del bosque, la fauna, usos, normas de comportamiento, etc. La guía, de fácil manejo, cuenta con información muy gráfica sobre especies, ecosistemas, situación actual, fauna y flora asociada a los bosques, historia y otros apartados dan contenido al guión de este proyecto: la necesidad de árboles y nuevos bosques del Archipiélago.