El Gobierno de Canarias está "a punto" de cerrar un acuerdo con el Ministerio de Fomento para limitar el uso del tacógrafo en el Archipiélago, que es obligatorio desde el pasado 1 de enero. Los transportistas de mercancías de las islas no capitalinas pueden quedar exentos, así como aquellos que lleven determinados tipos de cargas, con lo que se vendría a aplicar en Canarias una excepción contemplada ya en la Península para el traslado de productos lácteos.

En una entrevista concedida a EL DÍA, el consejero autonómico de Obras Públicas y Transportes, Juan Ramón Hernández, explicó que los transportistas de leche "tienen mucho que ver con los que llevan plátanos o materiales de construcción en las Islas y, en general, con todos los que realizan un recorrido específico".

De acuerdo con la normativa estatal vigente, los transportes de recogida de leche en las granjas o que tengan por objeto llevar a éstas recipientes de leche o productos lácteos destinados a la alimentación del ganado, "siempre que se desarrollen íntegramente en un radio de 100 kilómetros alrededor del centro de explotación de la empresa titular o arrendataria del vehículo", no están sujetas a los tiempos de conducción y descanso y al uso del tacógrafo que regula la Unión Europea.

Tampoco lo está el transporte de mercancías "de carácter privado complementario" realizado en el marco de su propia actividad empresarial por empresas agrícolas, hortícolas, forestales, ganaderas o pesqueras que se desarrollen íntegramente en un radio de 50 kilómetros alrededor del centro de explotación de la empresa.

Éstas son las dos excepciones que se quieren trasladar a las Islas, señaló Hernández, que remarcó que "no tiene mucho sentido que en las llamadas menores un transportista cuya empresa se sitúa en un radio de 30 kilómetros tenga que tener un tacógrafo, porque el sentido de éste es no superar un determinado número de kilómetros para que el cansancio no haga mella en el conductor".

Eso sí, aclaró que "las casuísticas" de Tenerife y Gran Canaria "son diferentes" a las del resto del Archipiélago, donde "el transporte se ve mucho más mermado". Cabe esperar, por tanto, que el encaje de las dos islas capitalinas apele a una exención en cuanto al tipo de mercancía, como la que beneficia al subsector lácteo en la Península.

"Se está estudiando exceptuar todo aquello que no tiene que ver en absoluto con el transporte de pasajeros. Ahí no vamos a luchar -argumentó el consejero- porque entendemos que da garantías. Canarias es una comunidad que recibe muchos turistas y necesitamos que tanto ellos como los escolares tengan esas garantías. Hemos aceptado que esto no se toque, pero sí otros aspectos, porque no entendemos que en un territorio discontinuo como el Archipiélago se pueda mantener el tacógrafo".

Cabe recordar que las quejas de los transportistas isleños han sido constantes desde que se les obligó, a comienzos de año, a instalar el tacógrafo. Ello derivó incluso en una huelga en la primera semana de abril, aplacada tras abrirse el proceso de negociación que fructificará en el acuerdo anunciado por Hernández. El titular autonómico de Transportes destacó también que en ese convenio se recogerá el compromiso de intensificar la labor informativa a los empresarios y profesionales del sector de la mano de los cabildos, que ostentan las competencias sobre las licencias de aquéllos.