Las Islas pueden estar sin construir ni una sola vivienda nueva durante los próximos cuatro años, que sería aproximadamente el tiempo que sin especulación inmobiliaria tardaría la sociedad canaria en digerir el stock actual de viviendas, según cálculos basados en datos del Ministerio de Vivienda y del Instituto Canario de Estadística.

En concreto, el Archipiélago cuenta con un total de viviendas (libres y protegidas) que alcanzaba a finales de 2008 las 30.299 unidades, mientras que, tomando la media de los últimos cinco años, incrementa su población a razón de unas 26.000 personas anuales, incluyendo la migración.

Teniendo en cuenta que el tamaño medio de un hogar canario es de 3,21 miembros por vivienda, y asumiendo que no se ampliaría con el devenir de la crisis económica, Canarias es capaz de generar unas 8.300 unidades familiares al año, con lo que serían necesarios 43 meses para absorber las más de 30.000 viviendas aún vacías.