El Santiago Bernabéu acoge, tres días después, otro Clásico sintiendo aún el dolor de la eliminación de la Copa del Rey, con un Real Madrid obligado a levantarse para no despedirse de una nueva competición ante un Barcelona que se ha habituado a exhibirse en Madrid.

Y para esa batalla tiene dudas Santiago Solari. Con su crédito rebajándose, debe decidir a qué dar prioridad, ir con todo en el clásico y poder pagarlo ante el Ajax en Champions o medir esfuerzos de jugadores claves y meter rotaciones.

Es segura la vuelta a la portería de Courtois. En la zaga todo apunta a que Varane forzará. La ausencia de Nacho por sanción le obliga. Vallejo no tiene ritmo de partidos tras jugar dos en toda la temporada y sería Casemiro el que retrasaría su posición si la rodilla izquierda de Varane no responde.

Las rotaciones pasarían por la entrada de Odriozola y Marcelo en los laterales. Este Madrid necesita recuperar la mejor imagen de referentes como Marcelo, Bale, Asensio e incluso Isco, que entró en la lista. La oportunidad llegaría también para Bale y Ceballos puede sentar a Kroos o Modric.

El Barcelona tiene una gran oportunidad para asestar un golpe definitivo al Real Madrid en LaLiga. Llega a la vigésima sexta jornada con siete puntos de ventaja sobre el segundo, el Atlético, y nueve respecto al conjunto madridista, por lo que una victoria de los de Ernesto Valverde, eliminaría a uno de sus dos rivales por el título.

Sin embargo, es complicado que la historia se repita 72 horas después. La realidad es que en el partido de Copa, los azulgranas no estuvieron bien en el primer tiempo. Aguantaron los primeros 45 minutos y decidieron con más goles que fútbol en la segunda.

En cuanto al once, Valverde se podría plantear hasta tres variaciones, una en cada línea.

Umtiti se perfila como novedad en el lugar de Lenglet como acompañante de Piqué; Arthur, que ya tuvo unos minutos el miércoles, parece que tiene un puesto fijo en la media, mientras que en la delantera todo está en función del estado físico de Dembélé.

En la banda derecha, Semedo tiene más opciones que Sergi Roberto. El portugués ofrece velocidad, justo lo que necesita Valverde para equilibrar la defensa frente a Vinicius, que es la principal amenaza del ataque local.

Con Piqué y Jordi Alba fijos en la zaga; Sergio Busquets y Rakitic en el centro del campo, la importancia en el juego de posición de Arthur le da ventaja.

En ataque, Leo Messi buscará el brillo que no tuvo el miércoles y Luis Suárez repetir los goles decisivos tras su doblete. El tercer hombre tendría que ser Dembélé, si es que está recuperado de sus problemas físicos como se demostró en el partido copero. Si no juega, Philippe Coutinho sería su sustituto.