Maikel García regresa por la puerta grande tras medio año de inactividad. El fajador de Añaza disputa, esta noche en el Terrero Los Mejías del Complejo Deportivo Pablos Abril de Taco, el Campeonato Intercontinental de la International Professional Combat Council -IPCC- en 70 kilos. Su combate frente al ucraniano Sergei Kuliaba será el de fondo del evento denominado Golden K1 Tenerife.

El santacrucero se perdió el Enfusion Tenerife de mayo, debido a la finalmente diagnosticada fractura de los huesos propios de la nariz, una lesión que se produjo en el mes de... ¡noviembre! "Me la rompí en la penúltima pelea que hice en Dinamarca", relata el protagonista. Efectivamente, amén de ceder en la pugna por el Mundial ISKA frente al marroquí Youssef Assouik, su físico salió mal parado.

Con todo, Maikel hizo la preparación para poner su título de España -69 kilos- en juego, en Bilbao, en el mes de marzo. "Lo hice sin hacer esparrin porque me dolía". Finalmente, la pugna por el cinturón se cayó, mas litigió frente a Fernando Gandarias. "Gracias a Dios que gané en el segundo asalto y no me llevé ninguna mano. Si no, hubiese perdido seguro".

No es para menos. "Fue una lesión bastante complicada. A la vista parecía que no tenía nada, pero desde que me llevaba un golpe sufría un dolor insoportable". Finalmente, una serie de resonancias desvelaron que "tenía el hueso destruido", comenta.

Tan grave era la dolencia que estuvo "a punto de dejarlo. Los médicos no eran muy optimistas. Mi entrenador -Moisés Ruibal- confió y me dijo que en un par de meses estaría listo. Así fue. Gracias a él me he levantado en los momentos más bajos", reconoce.

Varias semanas de reposo propiciaron una meteórica recuperación y el regreso de la normalidad. "He hecho bastante esparrin y ya no me molesta nada. Creo que la zona está perfecta. La preparación ha sido buena, estoy al 100% y con ganas de pelear".

Llegada la hora, Kuliaba le aguardará sobre el cuadrilátero lagunero. El deportista oriundo de Ucrania "está compitiendo en las grandes liga, con peleadores como el tailandés Buakaw Banchamek -en muay thai- o con el marroquí Nordin Ben Moh. El año pasado llegó a la final del Kunlun Fight. Es muy fuerte, pero hay opciones de ganar", apunta el santacrucero.

Después de "entrenar muy duro", el objetivo es ir a "pegar para que no me peguen", sintetiza el tinerfeño. "Hemos trabajado para salir a por él desde el primer asalto. Aquí, en casa, no se nos puede escapar el cinturón. Me da igual el tipo de título que sea. Lo importante es el rival que tenga enfrente".

Lo que sí reconoce García es que se trata de un cetro "muy importante", que significa "mucho" para él, en función a todo lo que ha parecido para volver a hacer lo que más le gusta. Maikel retorna para volver a dar la guerra de siempre.