Aitor Sanz no pudo completar el entrenamiento matinal de ayer. Mientras participaba en un ejercicio con balón, en las instalaciones de la Ciudad Deportiva Javier Pérez, sufrió un golpe en la pierna izquierda y se vio obligado a retirarse a la enfermería ayudado por el médico y el fisioterapeuta del equipo, por el dolor que sentía al caminar. "Molestias en el gemelo izquierdo", indica el club en un informe en el que igualmente destaca que el centrocampista realizó una parte de la sesión a la par que sus compañeros.

Y es que Aitor se había ejercitado a menor ritmo hasta la mañana de ayer, tanto el jueves por la tarde como el viernes, con la mala suerte de que sufrió ese percance justo en el pie que tantos problemas le dio en el tramo final de la temporada pasada. Precisamente, en la vuelta al trabajo del Tenerife tras las vacaciones de verano, Sanz reconoció que no se sentía "del todo bien" de la citada dolencia, aunque también apuntó que había "avanzado" en la recuperación durante el tiempo de descanso. Ahora, este contratiempo podría frenar su progresión.

El inconveniente tiene su origen en la tendinitis aquilea y las molestias en el gemelo de la pierna izquierda que le impidieron participar en los doce últimos partidos de la Liga 2017/2018. Después de unas semanas soportando el dolor, jugó su último partido el 9 de marzo, ante el Real Oviedo.

El parte médico se completa con Tyronne y Camille. El grancanario tiene "molestias en la pata de ganso" (estructura tendinosa situada cerca de la rodilla), mientras que el problema del lateral francés está localizado en los adductores. A diferencia de su compañero, Tyronne sí intervino con normalidad en un tramo de la sesión.

En cualquier caso, como sucede con Aitor, tanto Tyronne como Camille acabaron la campaña pasada lesionados. El mediapunta dejó de jugar el 1 de abril, en la visita al Osasuna y, tras ser convocado en la jornada posterior, enlazó ocho semanas de baja a causa de unas molestias en la rodilla izquierda. Por su parte, Camille protagonizó un final de curso intermitente y terminó siendo descartado en los dos encuentros con los que finalizó el campeonato por unas molestias musculares.

Samuel explicó que ayer que su evolución está "siendo progresiva" y se siente "algo mejor". Asimismo, aclaró que padece la misma lesión que le obligó a parar antes del verano, "una tendinitis" en la zona de los adductores de la que se está tratando para "intentar fortalecer la zona interior". Camille optó por no establecer plazos en su recuperación. "Lo más importante será regresar totalmente curado e ir con tranquilidad".