El delantero Wahbi Khazri amargó la ilusión de Panamá, que pretendía cerrar su estreno mundialista con una victoria, que no llegó y que dejó al plantel canalero sin punto alguno en el torneo.

El atacante del Rennes francés, de largo el mejor del partido, maquilló el papel de su selección, que cuarenta años después volvió a ganar un partido en una Copa del Mundo. Fue en Argentina 1978, ante México, en la primera victoria de un equipo africano en esta cita.

Muy lejos de la puja por los primeros puestos, de la trascendencia de los puntos, Panamá y Túnez cumplimentaron el trámite con un interés exclusivo.