No hay mejor manera de comenzar una temporada que "mordiendo" un oro. Simón Siverio, en salto de altura, y Jonay Jordán, en heptatlón, subieron a lo más alto del podio en el Campeonato de España de Pista Cubierta, celebrado el pasado fin de semana en Valencia. Se trata de "gasolina", según argumenta el teguestero, de cara al gran objetivo de ambos atletas del CajaCanarias para este año 2018: clasificarse para el Campeonato de Europa al Aire Libre, que se disputará del 7 al 12 de agosto en la capital alemana de Berlín.

Los campeones blanquiazules pasearon su éxito por EL DÍA. Siverio llegó a la Ciudad del Turia muy corto de competición, con apenas una comparecencia. "En enero me fui a República Checa y me cogí un gripazo. Competí allí de milagro, con fiebre y todo". Eso sí, "sabía que llegaba bien a Valencia porque había entrenado bien".

El comienzo "fue raro. Cambié la carrera de aproximación siete veces. Mi entrenador -Héctor González- me decía que me veía bien. Pero yo no me veía de ninguna manera. No tenía ritmo". Había que arriesgar. "Empecé alto -2,08 metros- para quedarme sentado y mirar cómo saltaban los demás". Una vez palpó el nivel de los rivales se convenció. "Hoy puedo ganar", dijo. "Sabía que estaba para saltar 2,20 o 2,22. Al final no hizo falta ni eso. Con 2,18 a la primera valió" para adjudicarse su segundo entorchado tras el de 2016.

Por su parte, Jonay Jordán arribó con menos inconvenientes a la cita. Además, todo le fue rodado desde el arranque del concurso, en el que se encontró "bastante bien". Y es que en la primera prueba ya cayó una marca. "Hacer mi mejor tiempo en los 60 metros lisos fue muy importante". Luego salvó la longitud "con más de siete metros". Y llegó el lanzamiento de peso, donde marcó "diferencias" respecto a sus adversarios. "Lancé tres metros más que el segundo y clarifiqué el resultado final". El primer día se cerró con la altura. Ahí se topó con el 1,97.

En la segunda jornada, otra marca personal para empezar: la de los 60 metros vallas. Después de alrededor de "cuatro horas" centrado en la pértiga -saltó 4,50 metros-, llegó el 1.000. "Estaba bastante cansado, y aunque es mi prueba más floja hice 2:56, cerca de mi marca". A la postre, 5.709 puntos que confirmaron su mejor marca, que estaba en 5.673 -lograda en 2017-. El lagunero rompió una racha de cuatro medallas de plata consecutivas -2014, 2015, 2016 y 2017- y sumó su tercer oro tras los obtenidos en los años 2012 y 2013.

A ambos se les abre a partir de ahora la temporada de competiciones al aire libre. El Europeo de Berlín concita toda la atención tanto de Siverio como de Jordán. La mínima para el primero, en salto de altura, es de 2,26 metros, su marca personal. Por su parte, la del segundo, en decatlón, es de 7.850 puntos, algo que todavía no ha podido hacer -su tope está en 7.639 puntos-.

Simón, que aspira a acudir a su cuarto Europeo tras los de Barcelona -2010-, Helsinki -2012- y Amsterdam -2016-, tiene para sí que su marca personal "no ha hecho justicia a lo que podía haber saltado. He superado varias veces las alturas de 2,25 y 2,26 de manera holgada. Luego he intentado 2,28 y ha sido un muro. Es cierto que solo son dos centímetros más, pero la altura es una prueba muy psicológica. Es difícil mantener esa tensión", reconoce.

En el caso de Jonay, intentará acceder a su primera cita continental. Con menos tentativas que Siverio, debido al desgaste que produce el decatlón y el consiguiente periodo de recuperación, el deportista de Aguere tiene marcado en rojo el "mitin Internacional de Arona". En "casa", sin el "desgaste de los viajes", tratará de conseguir una mínima "difícil, pero no imposible".

Simón Siverio debe igualar o superar su mejor marca de siempre, 2,26 metros, si quiere disputar su cuarto Campeonato de Europa en salto de altura, tras los de Barcelona, Helsinki y Amsterdam.

Jonay Jordan tiene que mejorar su marca de 7.639 puntos y alcanzar la mínima de 7.850, si su propósito es ser uno de los participantes en el decatlón de los venideros Europeos de Berlín.

Compañeros desde chicos

Simón Siverio lleva 12 años en el Tenerife CajaCanarias, los mismos que tiene de vida un club fundado en 2006. Mientras, Jonay Jordán fichó por la entidad blanquiazul en el año 2007.

Maestro y fisioterapeuta

Jonay Jordán estudió Educación Física. En la actualidad desempeña la docencia en el lagunero Colegio Mayco. "Trabajo por la mañana y entreno por la tarde. Lo compagino porque no puedo vivir del atletismo". Algo que sí hace Simón Siverio. "Las becas y las ayudas públicas me lo han permitido. Hablamos de un sueldo normal que te dan para vivir". El teguestero está estudiando fisioterapia, a lo que se prende dedicar en el futuro.

Tienen margen de mejora

Tanto Simón Siverio -29 años- como Jonay Jordán -26- entienden que aún les queda cuerda en el atletismo. "Esto tiene una fecha de caducidad, pero por lo menos intentaré llegar al Campeonato Iberoamericano, que se celebra en Tenerife en 2020. Cada año me veo mejor y con más madurez. Sé cómo relajarme, cómo ponerme en tensión...", señala Siverio. Mientras, Jordán explica que "la mejor edad para un decatleta está entre los 28 y los 32 años. Me quedan años para alcanzar mi máximo rendimiento y superar los 8.000 puntos, una barrera principal en el decatlón".