Juan José Rivero repasa el momento en el que se encuentra el área que dirige dentro del CD Tenerife, la de fútbol base. "Sesé" asegura que la cantera blanquiazul "goza de buena salud" y se muestra convencido de que en las categorías inferiores hay jóvenes promesas que acabarán siendo protagonistas en el equipo profesional.

Ponga las notas de diciembre. ¿Qué nota le pone a su sección?

La valoración es positiva. Y lo más importante es que nuestros futbolistas progresan adecuadamente. Estamos muy contentos.

Repasemos la trayectoria de algunos equipos. El Tenerife B se va afianzando entre los mejores. ¿Lo ve luchando por el ascenso?

Venimos haciendo desde hace muchos años un trabajo que se ve reflejado con la presencia de futbolistas en el primer equipo, que es lo más importante, aunque es verdad que en esta temporada hay que sumar la parte competitiva.

Los resultados reforzarán la elección del técnico Leandro Cabrera.

No vamos a descubrirlo. Había realizado un gran trabajo en otros equipos y ha ido mejorando. Es muy respetuoso, su dedicación al Tenerife es plena y estamos muy contentos con su trabajo. Esperamos que siga progresando y que lo pueda hacer en nuestro club.

El Juvenil está manteniendo el eterno pulso con Las Palmas. Incluso es líder con un partido más.

Esta es la temporada en la que menos futbolistas han tenido una participación continuada en equipos superiores. Es un conjunto más compacto y tiene una plantilla más definida, sin tantos jugadores que suben y bajan. Eso facilita que haya una mayor competitividad y que esté cerca de la UD Las Palmas para disputar un torneo muy bonito.

¿Qué parte de mérito le concede al entrenador Cristo Marrero?

Es muy exigente, le imprime su carácter al equipo y sabe lo que quiere en cada momento. Los chicos están muy contentos con él. Sabe llevar grupo y espero que siga progresando en el Tenerife.

¿Se está justificando la recuperación del Tenerife C?

Estábamos perdiendo un número importante de futbolistas de primer año regional, e incluso de segundo año, y con la creación del Tenerife C hemos retomado una edad importante al contar con escalafones de formación más compactos, sin el salto del Juvenil al equipo de Tercera. De hecho, el Tenerife C está haciendo una gran temporada. Ya lo demostró en la Copa Heliodoro.

¿Enero también es un mes de altas y bajas en la cantera?

No tenemos esa exigencia. En su día formamos las plantillas y estamos contentos con ellas, aunque tampoco le damos la espalda a que venga algún jugador en las distintas categorías. Manejamos información y nos llegan ofrecimientos que valoramos. A partir de ahí, podemos tomar decisiones a la hora de realizar pruebas o alguna incorporación. Lo que sí tenemos claro es que si viene alguien, tendrá que marcar la diferencia respecto a los que tenemos.

¿Cómo están las relaciones con otros clubes de la provincia?

Son muy buenas con todos los clubes de Canarias y, en particular, con los de Tenerife, aunque hay algunos muy concretos con los que no hemos sido capaces de llegar a acuerdos. Por parte del Tenerife estamos demostrando que queremos tener mejores relaciones. Hemos invitado a todos los clubes a una serie de reuniones, independientemente de que colaboren o no con nosotros. Buscamos que mejore el fútbol base insular, porque así nosotros también vamos a evolucionar.

¿Se han planteado establecer un vínculo con algún club grancanario como sí tiene la UD Las Palmas en Tenerife?

No lo contemplamos. Somos muy respetuosos con los clubes de la otra provincia. Sí hacemos un seguimiento a los futbolistas que nos parecen interesantes, tenemos buenas relaciones y sabemos cuál es la línea a seguir para fichar. Sin ir más lejos, este año incorporamos sin problemas a un futbolista del Huracán y a otro del Unión Viera. Y es de agradecer que nos dieran facilidades.

¿Está conforme con el número de canteranos que han dado el salto al primer equipo en las últimas temporadas?

Estamos muy contentos. Para hablar de cantera hay que hacer un análisis de lo que significa el CD Tenerife. Para ver si estamos o no en la línea a seguir, hay que hacer comparaciones y hacer un estudio para saber cómo está el fútbol profesional en España respecto a las canteras, y podemos observar que gozamos de buena salud. Vienen futbolistas del Tenerife B, del C y del Juvenil que van a ser protagonistas sin lugar a dudas en nuestro primer equipo. Es injusto hablar de cantera de manera aislada, como si el resto de los equipos jugaran con once canteranos cada domingo. Eso no existe, y el Tenerife sí es protagonista en ese aspecto, al igual que otros, como la Real Sociedad, el Athletic... El Tenerife está colocado en un muy buen lugar.

¿Tiene en cuenta los ingresos por traspaso de canteranos?

Hay datos que son irrefutables. A nivel nacional, e incluso internacional, se le hace un reconocimiento al trabajo de cantera del Tenerife y eso es un orgullo. No lo ve quien no quiere verlo. Por mucho que hagamos, habrá opiniones discrepantes, que son respetables. Tenemos que centrarnos en nuestro trabajo, más allá de que se escuchen voces críticas independientemente de lo que hagas.

¿Se ha habituado a ello?

Cada día me hacen más gracia. Algunos mantienen su discurso independientemente de lo que pase. Por ejemplo, después de un año y medio bueno del primer equipo trabajando con Martí, parece que estaban esperando un momento de flaqueo para sacar todo lo negativo. Pero la Liga es muy larga y somos optimistas con el trabajo que se hará en el futuro.

¿Qué sensaciones hay en el club respecto al primer equipo?

La sensación de que hay un buen grupo de futbolistas, aunque están pasando por un momento de ansiedad por querer hacer las cosas mejor y ver que no salen. Hay que abogar por la paciencia y arropar al equipo en los momentos más difíciles, sabiendo que la afición es exigente y que el entorno quiere más; quiere un Tenerife potente y que cumpla las expectativas que se han creado. Soy paciente y cauto, sabiendo lo que tenemos entre manos. No me cabe ninguna duda de que el equipo va a pelear por los puestos que dan derecho al ascenso. Y no me rasgo las vestiduras por ver ahora que la situación no es la que esperábamos. Veo un grupo muy comprometido y consciente de lo que hay en juego. Además, ni los equipos que están arriba van a terminar ahí, ni los que están un poco rezagados terminarán abajo. Tras el parón, los jugadores vendrán con las pilas cargadas.

A medias entre la base y la plantilla profesional, ¿qué planes tienen con Brian Martín?

Estuvo convocado en el partido con el Cádiz. Eso quiere decir que el míster cuenta con él. Lo importante es que pueda tener minutos y que siga creciendo. Le queda un año más de sub''23 y es un valor de nuestra cantera. Me gustaría destacar que otros futbolistas de la cantera son asiduos en los entrenamientos del primer equipo, y eso tiene un valor tremendo para el área de fútbol base. Ahora participan con una mayor naturalidad y normalidad, y es algo que nos satisface. Se ha conseguido un estatus de cantera con conexión con el primer equipo. Es lo que siempre habíamos anhelado y lo estamos consiguiendo, sin dejar de lado que es un camino largo.

Al igual que con Brian ahora, la temporada pasada se fijó la atención en Giovanni. Llegó a debutar con el primer equipo, pero luego dejó de trabajar a las órdenes de Martí. ¿Cómo lo explica?

Se tiende a hacer mucho ruido. Es un chico de primer año regional y tiene un futuro por delante muy grande, pero debe tener paciencia. Este Tenerife B es uno de los más jóvenes de los últimos años. Están Javi Alonso, Giovanni, Yuya o Philip con 19 años.

¿Qué tal vienen las nuevas generaciones de canteranos? ¿Hay materia prima en la base?

Cuando ha salido un jugador de una determinada posición de un gran nivel, es muy complicado que al año siguiente emerja otro. Pero aquí tuvimos a delanteros como Ayoze Pérez, Nano y Cristo en un tiempo muy corto. Eso no es fácil para un club tan humilde como el nuestro, pero volverá a pasar con total seguridad. También está el caso de los centrales, con Bruno, Alberto, Jorge... Pero metodológicamente hablando y desde el punto de la planificación, vamos a trabajar para que los chicos sean más competitivos y podamos darle más posibilidades de escoger a la secretaría técnica y al entrenador del primer equipo.

¿Cuentan con una coordinación entre el estilo de los equipos de base y el del primer equipo?

No hay diferencias muy grandes. Quizás, el que más se acerca es el Tenerife B. El hecho de que suban cuatro o cinco chicos a entrenar, significa que hay una adaptación, una similitud respecto a trabajos tácticos... El sistema es prácticamente el mismos, un 4-4-2, aunque el míster ha utilizado el trivote y en el Tenerife B también lo hemos hecho, así como el 4-2-3-1. Vamos de la mano.

En términos de formación, ¿está siendo útil la apertura del club a jugadores de otros países?

No es fácil que, por ejemplo, en un espacio tan breve de tiempo salgan dos porteros como Carlos Abad y Ángel Galván para que estén en el primer equipo. Tienen un muy buen nivel, pero se nos presentó una oportunidad en el caso de Philip y la aprovechamos. Lo más importante es que esos futbolistas se ajusten a los presupuestos del club. En ningún caso se llevarán a cabo fichajes desorbitados o descontrolados, o muy diferentes del resto. Si se ajustan a los parámetros establecidos en la entidad, los podremos tener en cuenta para una futura incorporación, como ha pasado con Philip, Yuya, Faridi... Todos se ajustan a los estándares económicos del Tenerife B.

¿Qué hay con los cedidos? A Nadjib le ha costado hacerse un hueco en el Real Murcia.

Estamos trabajando en ello. Nos hemos planteado que no continúe en el Murcia, en tanto en cuanto creemos que no ha tenido los minutos que esperábamos. Estamos haciendo una valoración para tomar una decisión beneficiosa para el crecimiento del futbolista y para el club.

¿Cómo se toman el lento proceso de mejora de la Ciudad Deportiva? ¿Están impacientes?

Lo importante es que hay un proyecto que va a comenzar, probablemente, en 2018. Con total seguridad, las mejoras marcarán un antes y un después para nuestra cantera y para el fútbol insular. Contaremos con una instalación de referencia en nuestra región. A partir de ese momento no se hablará de las malas infraestructuras que tenemos. Hemos sido pacientes y tenemos la esperanza de poder trabajar en ellas. Tenemos unas ganas tremendas de ver puesta la primera piedra y de que el proyecto tenga continuidad.